CAMBIAR PARA QUE
YO
CAMBIE AL
MUNDO
El sufí Bayacid dice acerca de
sí mismo:
De joven yo era un
revolucionario y mi oración consistía en decir a Dios: "Señor, dame
fuerzas para cambiar al mundo".
A medida que me fui haciendo
adulto y caí en la cuenta de que me había pasado media vida sin haber
logrado cambiar a una sola alma, transformé mi oración y comencé a decir:
"Señor, dame la gracia de transformar a cuantos entran en contacto
conmigo, aunque sólo sea mi familia y mis amigos, con eso me doy por
satisfecho".
Ahora que soy viejo y
tengo los días contados, he empezado a comprender lo estúpido que yo he
sido. Mi única oración es la siguiente: "Señor, dame la gracia de
cambiarme a mí mismo".
Si yo hubiera orado de
este modo desde el principio no habría malgastado mi
vida.
TODO EL MUNDO PIENSA EN CAMBIAR A LA
HUMANIDAD. CASI NADIE PIENSA EN CAMBIARSE A SÍ
MISMO.
Anthony de
Mello 
Tomado de su libro "El
canto del pájaro"
ÉCHALE GANAS A
LA VIDA
La vida es más grande o más
pequeña según las ganas que le eches y el amor que le pongas. Tiene
una forma u otra, según la limes, la moldees y la vayas amasando.
Los frutos no son los mismos para todos: cada uno nace con la semilla que
debe desarrollar; cultivarla bien lleva al éxito. No
envidies la de nadie, porque en todas se puede dar anchura, espacio y
plenitud. En todos los campos hay malas hierbas, sequías, tramos
pedregosos, arenosos, inseguros, pero en ninguna falta un rocío diario, un
sol que caliente y una lluvia que nutra.
Dios te saca del apuro.
¡Sólo necesitas echarle ganas!
Cuando uno hace lo que le gusta, sólo cuenta el avance, no
las horas que le dedica; sólo cuenta que su objetivo va cuajando, no
el esfuerzo y el tiempo que entrego en él; sólo cuenta la semilla que
lleva dentro para desarrollar, no la clase de árbol que se le ha
destinado.
Cuando te gusta lo que haces, no percibes el
tránsito del tiempo, que siempre te parece corto, ni el vuelo de las
horas, que siempre parecen bien empleadas. Casi siempre soñamos ser
lo que no llegaremos a ser nunca, pero en medio está el motor de la
esperanza que nos impulsa y el aliciente que nos aguijonea la
vida. Debes saber
penetrar con ojo de águila en la realidad que te rodea y a la vez saber
volar sobre ella y mirar desde arriba dónde debes posarte.
Échale ganas a la vida, aunque
algunos miren más la huella de tus fracasos, que la excelencia de tus
logros. Te encontrarás que la vida se cansa de presentar los mismos
hombres y los mismos acontecimientos, pero nosotros nunca acabamos de
entender. Parece que sólo se aprende en la derrota, se adquiere
sabiduría en las guerras perdidas y habilidad en la realidad y los
escollos.
Échale ganas a la vida aunque
no sea fácil, y a veces parezca que nada puedes conseguir y nada vale la
pena. Vive tus sentimientos, expresa tu verdad, despójate de
prejuicios, asimila los hechos y adórnalo todo con la imaginación.
Ordena tu ideas, aléjate del pensamiento que te tortura y de los lastres
que te hunden, desecha todo eso que le roba belleza a la vida.
Mírate como en el fondo de un estanque y líbrate de tu propia
basura. El alma se limpia con amor, la vida se endereza rectificando
y uno se hace hombre tocando el alma de las cosas. No le busques a
la vida metas definitivas, porque todo es evolutivo, transformable,
susceptible de mejoría.
Échale ganas a la vida,
y corre sobre ella como si llevaras la fuerza en los estribos, la acción
en las manos, la convicción en la frente y el fuego en el corazón.
¡Pon a calentar tu vida, pero echándole ganas!
Autora: Zenaida Bacardí de
Argamasilla 
Libro:"Cartas para una Vida"
ORACIÓN
Que hoy la Paz reine dentro de
ti. Confía en Dios que estás exactamente en el lugar donde deberías
estar. No debes olvidar las posibilidades infinitas que resultan de
la Fe. Utiliza las gracias que has recibido y pásalas con el amor que se
te ha dado. Que estés contento de saber que eres hijo de
Dios...
Deja
que su presencia se derrame en tus huesos y permita a tu alma la libertad
de cantar, bailar, alabar y amar. Está para cada uno y en cada uno
de nosotros.
Amén
Enviado
por: Yvonne
Benítez
Un Abrazo y que Dios derrame sobre ti,
muchas bendiciones de Vida, Paz, Amor, y mucha
Prosperidad;
(r).
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MARIA DEL
CARMEN