Hay veces que nuestra confección humana, preconceptos y
estructuras culturales no nos deja pensar o llegar más allá.
Mi desafió
personal empezó 2 años atrás, al perder mi pierna izquierda en un accidente de
auto. Calculo yo que el impacto sufrido, me ocasiono un defecto cerebral, y
mientras estaban amputándome la pierna, me hice la promesa-desafío de correr la
maratón de NY.
Muchos que me conocen dirían que el defecto lo tengo de nacimiento, pero
en fin.
En enero 2004 me compre la pierna para poder correr. Lo más
antiestético que uno se imagina, a tal punto que mi hermana cuando vio la foto
me comento: " No la puedes cubrir con algo?".
Una de las primeras barreras que tuve que superar fue ver mi cuerpo
mutilado y aceptar que todos me van a mirar por la pierna que tengo puesta o por
la que no tengo puesta, pero siempre voy a llamar la atención.
Mi
"entrenamiento" empezó al día siguiente. Lo digo entre comillas ya que tuve que
aprender a correr de nuevo, el balance y el ritmo era totalmente
diferente.
A los 4 meses antes de la Maratón empecé a seguir un programa para
principiantes que baje de Internet. Lo cumplí casi al pie de la letra.
Durante estos meses corrí varios 10k con el apoyo impagable de una persona
que merece todo mi respeto por la garra y alegría que le pone a la vida: La
"GARZA" MORAIZ.
Durante las 3 horas preliminares a la largada uno está en
un entorno de nervios y excitación junto a 35.000 personas más.
Y pensar que yo me sentía un "marciano" entrenando solo durante 4
meses, corriendo 5 días a la semana. Ahí me sentí acompañado por gente que
compartía el mismo objetivo, o sea más marcianos.
Gracias a los
tips de la Garza, nos fuimos ubicando en lugares estratégicos para poder largar
en "Poll Position".
Después del estruendo del cañón de largada, comencé a recibir soporte de
gente que no conocía y que nunca más iba a verla en mi vida.
Los
primeros fueron unos Gigantes de la NYPD (policías de NY), estábamos cruzando en
Verazano Bridge, se pusieron a mi lado y me dijeron "You are an
Inspiración".
Después de ese puente uno comienza a escuchar gritos constantes y
sostenidos del público, los cuales no paran hasta la línea de llegada.
A
la 1ra hora de carrera, tuve que frenar a sacarme el sudor que se me había
acumulado en la media de gel, la cual envuelve mi muñón y muslo, al cual no deja
respirar ya que necesito esa succión para mantener la prótesis pegada a mi
cuerpo.
Unos de los tips de la Garza, fue que me escribiera mi nombre en
la remera. Le hice caso y el efecto fue emocionante. Cada paso que daba
escuchaba un grito del público que decía "GO MARCOS GO".
La cantidad de
corredores que se ponían a mi lado y con un gesto, una mirada, una palabra
cansada y sin aliento, me decían y volvían a decir "you are an inspiration" fue
uno de mis motores para continuar empujando mi cuerpo para adelante.
Pero creo que la más destacada anécdota que tengo, fue cuando estaba en
el Km 27, me sentía bien y con fuerza, tenía un ritmo aceptable e iba
recuperando posiciones hasta que veo 10 metros delante de mí, una persona con la
bandera Uruguaya en la remera.
Esta persona estaba caminando o arrastrándose. Hombros caídos cabeza baja
y pies pesados. Cuando lo alcanzo, le pongo una mano en la espalda, lo miro y le
digo: "Vamos Uruguay Vamos"...No le vi mucho futuro, tenia cara de destruido,
por lo tanto seguí mi ritmo dejándolo atrás.
No pasaron ni 3 minutos que siento que alguien se pone a mi lado y me
dice: "Gracias, muchas Gracias" y me deja atrás con un tranco firme.
Obviamente cuando me paso le vi la bandera Uruguaya en la espalda.
Nuevamente piel de gallina y sensación de satisfacción.
Km 32 =
todo músculo que no hayas entrenado bien, se te acalambra.
Aquí comenzó mi cuesta arriba y creo que si no hubiese sido por el
entorno, las ganas de llegar y que mi familia me estaba esperando en la llegada,
me hubiese costado el doble.
Tenía el gemelo contracturado, o sea, el único; y mi pierna buena sobre
exigida y cansada. Por lo tanto tuve que aflojar el ritmo. Hasta acá tenia
3:10 horas.
KM 38. A pesar de los continuos gritos de "Go Marcos Go" del
público, uno puede reconocer hasta el susurro de su familiares entre el publico.
Aunque no fue exactamente un susurro, en el Km 38 escucho un cornetazo de cancha
de fútbol y un grito desorbitado; " VAMOS AMOOOOOOORRRRRR"..., apoyo
indescriptible en todo momento, antes, durante y después. Los vi y nuevamente
una recarga de baterías y piel de gallina a punto del llanto.
Pero todavía me quedaban 3 Km. mas, así que me tragué el nudo en la
garganta y puse foco en la línea de Llegada.
Cuando cruce la línea
final (4:39 horas/ 42Km), todo fue satisfacción, llanto solitario y ganas de
seguir viviendo estos "Ecos" indescriptibles.
Moraleja aprendida:
Proponte lo que quieras, que si realmente lo queréis, lo vas a lograr. Los
límites no existen, uno mismo los crea.
Siempre hay alguien más, con situaciones más difíciles y con más garra
que uno al cual lo podes usar como "inspiración".
Por ejemplo yo veo como inspiración a Sarah Reinertsen, le falta la
pierna izq. desde arriba de la rodilla y este año corrió el Ironman de
Hawai...
¿QUIÉN DIJO, QUE NO SE PUEDE???
Luisma Casares