Cerca de tu casa, en tu trabajo o
lugar de estudio, o dondequiera que te halles, pueden existir personas a
tu alrededor que estén necesitadas de una persona amable, de un gesto
amistoso o de un poco de cariño, de unas palabras de ánimo o de consuelo.
Hoy acércate generosamente a alguna persona necesitada y comparte con ella
unos pocos minutos de tu grandeza espiritual. Hoy sé generoso. Mañana lo
serán contigo.
Grace Fdez
|