Sé tú mismo, no intentes ser
otro
Calma tu espíritu, busca de
nuevo la fuente de donde nace todo y elimina cualquier vestigio de maldad o
egoísmo.
Si te preocupas demasiado por
descubrir lo que de bueno o malo tiene el prójimo, te olvidarás de tu propia
alma y quedarás agotado y derrotado por la energía que empleaste en juzgar a los
demás.
La vida es una manifestación
de amor, y un guerrero de la luz debe concentrarse en promover la paz y no el
combate.
Morihei
Ueshiba
Adaptado
por
Paulo
Coelho