
Sobre los abrazos
y los abrazantes
Un abrazo hace
que uno se sienta bien todo el día
TEORÍA
El contacto
físico no es sólo algo agradable. Es algo necesario. La
investigación científica apoya la teoría de que la estimulación por el contacto
es absolutamente necesaria para nuestro bienestar físico y emocional.
El contacto
terapéutico conocido como instrumento esencial para la curación, en la
actualidad forma parte del adiestramiento de las enfermeras en varios centros
médicos de importancia. Se lo emplea para aliviar el dolor, la depresión
y la ansiedad; para acrecentar en los pacientes la voluntad de vivir; para
ayudar a los bebés prematuros (que se han visto privados de contacto en sus
incubadoras) a crecer y fortalecerse.
Con diversos
experimentos se ha demostrado que el contacto físico:
Nos hace ver con mejores
ojos nuestra propia persona y nuestro ambiente;
Tiene un efecto
positivo en el desarrollo del lenguaje y en el cociente intelectual de los
niños;
Provoca
alteraciones fisiológicas mensurables en quien toca y en el que es tocado.
Apenas comenzamos a
comprender el poder que tiene el contacto físico.
Si bien hay
muchas formas de tocar sugerimos que el abrazo es una muy especial, y que
contribuye de un modo muy importante a la curación y la salud.
BASE LÓGICA
El abrazo es:
Agradable.
Ahuyenta la
soledad.
Aquieta los
miedos.
Abre la puerta de
los sentimientos.
Fortalece la
autoestima ("¡Dios! ¡Quiere abrazarme... a mí!")
Fomenta el
altruismo. ("Me cuesta creerlo pero tengo ganas de abrazar a este
grandísimo bandido.")
Demora el
envejecimiento; los abrazantes se mantienen jóvenes por más tiempo.
Ayuda a dominar
el apetito; comemos menos cuando nos alimentamos con abrazos...
Y cuando tenemos los
brazos ocupados en estrechar a los demás.
ADEMÁS, EL ABRAZO
Alivia las
tensiones.
Combate el
insomnio.
Mantiene en buen
estado los músculos de los brazos y hombros.
Es un ejercicio
para el estiramiento para los de poca estatura.
Es un ejercicio
de flexión para los altos.
Ofrece una
saludable alternativa ante la promiscuidad.
Representa una
opción y sin riesgo ante el alcohol y otras adicciones (más valen abrazos que
vino y pinchazos!).
Afirma el ser
físico.
Es democrático:
cualquiera es candidato a un abrazo.
Y TAMBIÉN
Es
ecológicamente aceptable, pues no altera el ambiente, más bien todo
lo contrario, genera una atmósfera contagiosa de armonía y amorosidad
alrededor.
Ahorra energía al
economizar calor.
Es portátil.
No requiere
equipos especiales.
No necesita de un
sitio especial; cualquiera desde un umbral hasta una sala de conferencias para
ejecutivos, desde el atrio de una iglesia hasta un estadio de fútbol, es un
buen lugar para un abrazo.
Hace más felices
los días felices.
Hace soportables
los días insoportables.
Estimula el
sentimiento de arraigo.
Llena los vacíos
de la vida.
Continúa
ejerciendo efectos benéficos aun después de la separación.
Y siempre hay una
ocasión para darse un buen abrazo, no las perdamos!