Asunto: | [RedLuz] Centros de control mundial | Fecha: | Viernes, 28 de Marzo, 2008 19:34:08 (+0100) | Autor: | Guillermo <guillermo @.....es>
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(Cuando los mensajes de luz nos hablan de los poderes oscuros que nos
gobiernan en la sombra, no se concreta quiénes son, pero en estas
informaciones de la Red Voltaire se nos da todo lujo de detalles. Aconsejo
leerlo poco a poco porque es muy denso.)
Think tanks: centros de retórica para
el dominio y el control del planeta
Al buen gusto norteamericano
La Fundación Ford, fachada filantrópica de la CIA
París (Francia). 31 de enero de 2005. (Red Voltaire).- Entre
1947 y 1966, la Fundación Ford desempeñó un papel
clave en las redes de injerencia norteamericana en Europa mediante la subvención
de revistas, programas científicos y organizaciones de izquierda
no comunistas. La mayor organización filantrópica del mundo
ofrecía en realidad una fachada respetable para las operaciones
de financiamiento y contacto de la CIA. Este papel se facilitaba aún
más por el hecho de que fueron las mismas personas las que conformaron
y dirigieron ambas organizaciones. A continuación la primera parte
de nuestra investigación sobre la rama cultural del intervencionismo
atlántico.
Golpes de Estado con suavidad y disimulo
La Albert Einstein Institution: no violencia según la CIA
Thierry Meyssan. París (Francia). 10 de febrero de 2005. (Red
Voltaire).- La no violencia como técnica de acción política
puede ser utilizada con cualquier fin. En los años 80, la OTAN se
interesó por su posible uso para organizar la resistencia en Europa
después de una invasión del Ejército Rojo. Hace quince
años que la CIA la utiliza para derrocar gobiernos recalcitrantes
sin provocar la indignación internacional. Para ello dispone de
una vitrina ideológica: la Albert Einstein Institution del filósofo
Gene Sharp. La Red Voltaire revela la sorprendente actividad de esta oficina,
de Lituania a Serbia pasando por Venezuela y Ucrania.
Un amigo que «nos quiere» bien
Por qué la Fundación Ford subvenciona la oposición
Paul Labarique. París (Francia). 31 de enero de 2005. (Red Voltaire).-
Desde su creación, la Fundación Ford no ha cambiado sus objetivos
de defensa de los intereses estratégicos de Estados Unidos. Si durante
la Guerra Fría no fue más que una cobertura de la CIA, durante
los últimos veinte años adquirió autonomía
y desarrolló un nuevo método de injerencia, el soft power,
consistente en intervenir en los debates internos de sus adversarios
subvencionando
a unos para hundir a otros, o estimulando rivalidades esterilizantes. Ejemplo
más reciente: el financiamiento del Forum Social Mundial para tratar
de neutralizarlo.
La CIA con rostro humano
Las ONG, nuevo brazo de la diplomacia estadounidense
París (Francia). 11 de febrero de 2005. (Red Voltaire).- Aunque
los recientes sucesos de Georgia y Ucrania fueron calificados de «revoluciones»,
la realidad es otra ya que su objetivo no era un cambio de sociedad sino,
únicamente, provocar cambios de gobierno favorables a los aliados
de Estados Unidos. Las protestas y los movimientos callejeros fueron organizados
por ONGs financiadas y dirigidas, directa o indirectamente, por Washington
conforme a un plan expuesto hace más de un año en un informe
oficial de la USAID. En unos años, ciertas ONGs se han transformado
en caballos de Troya del departamento de Acción de la CIA.
Las redes de la injerencia y de espionaje estadounidense.
Freedom House: cuando la «libertad» no es más
que un pretexto
París (Francia). 3 de enero de 2005. (Red Voltaire).- Taller
propagandístico creado por Roosevelt para preparar a la opinión
pública norteamericana para la guerra, Freedom House (Casa de la
Libertad) volvió a la carga para estigmatizar al campo soviético
durante la Guerra Fría. En aquellos tiempos utilizaba a intelectuales
occidentales, entre ellos franceses. Hoy, organiza las campañas
mediáticas internacionales para la libertad religiosa en China y
para la paz en Chechenia. Freedom House está presidida en la actualidad
por James Woolsey, ex director de la CIA.
Atlantismo
El Instituto de Historia Social, sucursal antisocial
Annie Lacroix-Riz. París (Francia). 7 de noviembre de 2005. (Red
Voltaire).- Sucursal de la patronal francesa encargada de la lucha contra
la influencia comunista dentro del movimiento obrero, el Instituto de Historia
Social fue dirigido ?luego de la Segunda Guerra Mundial? por ex comunistas
corruptos y colaboradores del ocupante nazi que acababan de salir de prisión.
Rápidamente incorporado a las redes atlantistas, fue ampliamente
financiado por la CIA y desempeñó un papel activo en la división
del movimiento sindical francés. Con la ayuda de documentos provenientes
de archivos, la profesora Annie Lacroix-Riz describe detalladamente aquella
manipulación en momentos en que la nueva política estadounidense
busca revivir el Instituto de Historia Social.
NED: la Fundación estadounidense para la democracia
Las redes de la injerencia «democrática»
Thierry Meyssan. París (Francia). 21 de noviembre de 2004. (Red
Voltaire).- En su discurso sobre el estado de la Unión, el presidente
Bush anunció su intención de duplicar el presupuesto de la
Fundación Nacional para la Democracia (NED). Este organismo fue
creado por Ronald Reagan para continuar las acciones secretas de la CIA
aportando apoyo financiero y dirigiendo sindicatos, asociaciones y partidos
políticos. La NED se vanagloria de haber dirigido y manipulado el
sindicato polaco Solidarnosc, la Carta de los 77 y muchos otros grupos.
Bajo la dirección del Departamento de Estado y en asociación
con los partidos republicano y demócrata, el patronato y los sindicatos,
la NED ha encontrado numerosos «repetidores» institucionales
e individuales en todas partes del mundo, incluyendo Francia.
La ONG francesa Reporteros Sin Fronteras
fracasa en su intento de penetrar a la UNESCO
Jean Guy Allard. 17 de marzo de 2008. Agencia IPI.- La Organización
de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO)
retiró este miércoles 12 de marzo el coauspicio con motivo
del Día por la libertad de Internet al grupo Reporteros Sin Fronteras
(RSF), de Francia, anunció Prensa Latina desde París.
EE.UU.: La doma de los jóvenes bravíos
Juan Gelman. Ciudad de México (México). 2 de febrero de
2008. Altercom.- Hay una verdadera parafernalia para lograrlo en EE.UU.
y el remedio es sencillo: consiste en criminalizar y más, en patologizar
a los jóvenes norteamericanos rebeldes, disconformes con el autoritarismo
y que lo retan. Se los considera trastornados mentales y carne de
tranquilizantes,
anfetaminas y otras sustancias psicotrópicas.
El marcador del 2007
El lobby pro-Israel y la política de Estados Unidos en Medio
Oriente
James Petras. 6 de julio de 2007. Agencia IPI.- Nunca, en la historia
reciente, la política de Estados Unidos en Oriente Medio ha sido
sometida a tal bombardeo de presiones en conflicto por parte de antiguos
aliados, clientes y adversarios. Los puntos en disputa abarcan cuestiones
básicas de guerra y paz, de las cuales las más importantes
son las diferentes respuestas al conflicto palestino-israelí, la
ocupación de Irak y la invasión y ocupación autorizada
de Somalia a cargo de Etiopía y Estados Unidos.
Minucioso análisis de la televisora multiestatal latinoamericana
Telesur desmonta el informe de Reporteros Sin Fronteras
Caracas (Venezuela). 8 de junio de 2007. ANC.- La televisora multiestatal
Telesur desmontó, mediante un acucioso análisis, el discurso
de manipulación y de desinformación contenido en el informe
de la organización Reporteros Sin Fronteras (RSF) presentado este
miércoles. El análisis realizado por el equipo de Telesur
cuestiona el contenido del referido texto, argumentando con datos reales
y corroborables la información tendenciosa con la que esta organización
pretende generar una matriz de opinión en la población nacional
e internacional.
ONG Francesa al servicio de la administración Bush
Reporteros Sin Fronteras pero con contradicciones
Salim Lamrani. París (Francia). 4 de octubre de 2006. (Red Voltaire).-
Lejos de poner fin a la polémica, la Carta abierta con la que Reporteros
Sin Fronteras quiso dar respuesta a nuestros colaboradores provocó
numerosos comentarios irónicos en la web de lengua francesa y de
lengua española. Salim Lamrani desmiente los argumentos de RSF y
replantea el debate sobre el financiamiento estadounidense que recibe la
organización y el papel de esta al servicio de la política
de Washington.
El nuevo movimiento proisraelí en Estados Unidos
El CUFI: 50 millones de evangelistas partidarios de Israel
Thierry Meyssan. París (Francia). 18 de agosto de 2006. (Red
Voltaire).- En un país cuyos ciudadanos abandonan los partidos políticos
para integrarse a las iglesias evangélicas, el condicionamiento
de la opinión pública empieza por la manipulación
de los creyentes. Paralelamente a la preparación de la ofensiva
contra el Líbano, el Pentágono y el ejército israelí
montaron el CUFI, una federación que reúne a los cristianos
sionistas y cuyo objetivo es transformar a 50 millones de adeptos de las
iglesias evangélicas en militantes a favor de la guerra.
Rumor de antisemitismo
Irán: los gobiernos de la coalición fabrican noticias
falsas
Thierry Meyssan. París (Francia). 4 de junio de 2006. (Red Voltaire).-
Gracias a la impunidad confirmada de la que disfrutan desde el 11 de septiembre
y a partir de la guerra contra Irak, los neoconservadores no vacilan ya
en utilizar las más altas funciones de los Estados para difundir
rumores y calumnias. Manipulando medios de difusión que anteponen
la reacción inmediata y la emoción a la verificación
y al análisis, acusan a Irán de obligar a los judíos
a portar sobre sus ropas un símbolo discriminatorio. Es mentira,
pero hace efecto y duele. Los gobiernos de Estados Unidos, Australia y
Canadá se prestan a este juego.
Plenos poderes
La Federalist Society al asalto de la Corte Suprema de Estados Unidos
París (Francia). 6 de febrero de 2006. (Red Voltaire).- La Federalist
Society, asociación profesional de abogados y de magistrados racistas,
es el vivero de donde provienen los principales consejeros jurídicos
de la administración Bush. Esa asociación también
redactó, antes de los atentados del 11 de septiembre de 2001, las
leyes antiterroristas de excepción. Luego de la confirmación
de la nominación del juez Alito, la Federalist Society detenta cuatro
de los nueve asientos de la Corte Suprema. John Yoo, teórico de
la asociación, se pronuncia por los plenos poderes perpetuos del
presidente.
Pesadilla estadounidense
Skull and Bones, la élite del Imperio
París (Francia). 18 de enero de 2006. (Red Voltaire).- En el
seno de la muy elitista y puritana Universidad de Yale, son escogidos cada
año por cooptación quince hijos de muy buenas familias. Estos
forman una sociedad secreta de ritos morbosos: los Skull and Bones (Calavera
y Huesos). A lo largo de su vida se apoyan y ayudan entre sí ante
las veleidades democráticas de la plebe que aborrecen. Lejos de
ser adversarios, los dos candidatos de la más reciente elección
presidencial, George W. Bush y John Kerry, se codeaban en secreto desde
hace 36 años en el seno de esa cofradía. La investigación
de Alexandra Robbins sobre los Booners constituye hoy un trabajo de referencia.
Su libro estará disponible en francés la próxima semana.
Empujando a los pueblos para un choque de civilizaciones
Las iglesias evangélicas y el juego de Estados Unidos en
el mundo árabe
Charles Saint-Prot. 20 de noviembre de 2005. (Red Voltaire).- Desde
1947, numerosos jefes militares y dirigentes políticos estadounidenses,
entre ellos los Bush, pertenecen a un grupo evangélico secreto,
llamado «La familia», cuya sede se encuentra cerca del Pentágono,
en la propiedad de los cedros. Esa organización, luego de aliarse
al Vaticano en América Latina en contra de la teología de
la liberación, dirige hoy una doble ofensiva contra católicos
y musulmanes. De ella provienen también los principales personajes
de la dirección política de Estados Unidos y extiende su
influencia por el mundo mediante sus misioneros. El politólogo Charles
Saint-Prot, quien participará en el coloquio Axis for Peace, analiza,
en el trabajo que hoy les presentamos, la estrategia de ese grupo evangélico
en el mundo árabe.
Guerra Fría cultural
EHESS: las ciencias sociales francesas alimentadas por la CIA
27 de octubre de 2005. (Red Voltaire).- Desde el principio de la Guerra
Fría, la CIA se preocupó por tomar el control de la enseñanza
de las ciencias sociales en Francia para sustraerla a la influencia de
los comunistas. Mediante el físico Pierre Auger, entonces director
de la enseñanza superior, la CIA dirigió la creación
de una nueva sección dentro de la École pratique des hautes
études [Escuela Práctica de Altos Estudios], al margen del
CNRS [Centro Nacional de Investigación Científica]. Después
financió nuevas instalaciones, la Maison des sciences de l’homme
[Casa de las Ciencias del Hombres], y logró hacer de esta, en 1975,
la École des hautes études en sciences sociales [Escuela
de Altos Estudios en Ciencias Sociales] (EHESS), que preside el historiador
anticomunista François Furet.
La traición de los libertarios franceses
Venderle a la izquierda el «choque de civilizaciones»
Cedric Housez. París (Francia). 5 de septiembre de 2005. (Red
Voltaire).- El semanario satírico francés Charlie Hebdo y
la asociación feminista Prochoix, después de hacerse de una
identidad libertaria y de un público entre los electores de izquierda,
se han convertido en repetidores de las tesis neoconservadoras sobre el
«choque de civilizaciones». Ese rápido viraje les permitió
obtener apoyo institucional y mediático conservando al mismo tiempo
parte de su público. Hoy se dedican a venderle a la izquierda las
políticas de Washington y Tel Aviv, y arremeten
Apartheid y comunismo
Los caballeros del Círculo Pinay
París (Francia). 25 de agosto de 2005. (Red Voltaire).- Durante
los años 70 y 80, un grupo informal de dirigentes de los servicios
secretos occidentales se reunía alrededor del ex presidente del
Consejo francés, Antoine Pinay. El Círculo disponía
de contactos con los think tanks de aquel entonces y así como de
amplio acceso a la prensa. Organizó campañas de difamación
contra la Unión Soviética y de desestabilización contra
dirigentes socialistas europeos. Retirado ya de la política, Antoine
Pinay hacía una segunda carrera como defensor del apartheid en Sudáfrica
y del «Occidente cristiano».
Una pasarela israelo-estadounidense
Los trucos de la Foundation for the Defense of Democraties
París (Francia). 18 de agosto de 2005. (Red Voltaire).- Creada
por millonarios estadounidenses a pedido del general Ariel Sharon, la Foundation
for the Defense of Democraties (FDD) preparó la retórica
de la democratización forzosa que utiliza hoy George W. Bush. A
fuerza de mescolanzas y trucos, este think tank [Centro de investigación,
de propaganda y divulgación de ideas, generalmente de carácter
político. Nota del Traductor] se sirvió primero del pánico
que sembró el 11 de septiembre para favorecer la movilización
contra los palestinos. Después la emprendió con la ONU antes
de llamar a atacar a Irak, a Arabia Saudita, Siria y Líbano.
Propaganda
La Jamestown Foundation, una agencia de prensa a la medida
París (Francia). 5 de abril de 2005. (Red Voltaire).- Creada
por la CIA para sacar al escenario público a los tránsfugas
comunistas de la época de Reagan, la Jamestown Foundation ha reanudado
sus servicios en el gobierno de Bush. Edita boletines especializados sobre
el mundo poscomunista y sobre el terrorismo que sirven de referencia a
los think tanks de Washington. Universitarios y periodistas se dedican
a describir un mundo lleno de fantasmas cuya hostilidad, por sí
misma, justifica el imperialismo norteamericano.
AEI: imperialismo de mercado
El Instituto Norteamericano de la Empresa
París (Francia). 13 de marzo de 2005. (Red Voltaire).- El Instituto
Norteamericano de la Empresa (American Enterprise Institute - AEI) se ha
convertido en el propagandista del patronato republicano a favor del
imperialismo
de libre mercado. A semejanza de un juego de muñecas rusas, contiene
en su interior la Nueva Iniciativa Atlántica (New Atlantic Initiative-NAI)
que dirige la integración euroatlántica y el Proyecto para
un Nuevo Siglo Americano(PNAC) que redactó el programa del gobierno
de Bush. El Instituto es dirigido tras bambalinas por el ex presidente
Gerald Ford y el actual vicepresidente Dick Cheney. Como cada año,
invitan a una estación de invierno en Colorado a un centenar de
personalidades con el objetivo de debatir a puertas cerradas.
El think tank de los libertarianos
El Cato Institute, el anarquismo de las multinacionales
París (Francia). 7 de marzo de 2005. (Red Voltaire).- Producto
híbrido de la revolución hippie del 68 y de las teorías
reaccionarias de Friedrich von Hayek, el Cato Institute pasó de
la promoción de la libertad sexual y la liberalización de
la marihuana a la defensa de los intereses de las multinacionales contra
los ecologistas. Se concentró sobre todo en la destrucción
del Estado protector y, singularmente, en la privatización total
de las pensiones. Uno de sus responsables, el ex-ministro fascista chileno
José Piñera, inspiró la reforma que George W. Bush
va a aplicar como objetivo prioritario en su segundo mandato.
Industria de la retórica política
La Fundación Heritage: «listo para pensar»
París (Francia). 27 de febrero de 2005. (Red Voltaire).- La Fundación
no es un think-tank, es decir un laboratorio de ideas, sino una organización
militante lista para intervenir instantáneamente en el debate público.
No trata de elaborar y proponer soluciones para problemas políticos,
sino de pensar en lugar de los congresistas y dictarles su trabajo legislativo.
Siempre estuvo estrechamente vinculada a la administración Reagan
y al gobierno Thatcher, ha sabido imponer en los medios y en las asambleas
un discurso único y conservador, militarista y pseudoliberal. Con
un presupuesto de comunicación de 35 millones de dólares
anuales, la Fundación Heritage redacta ahora los argumentos de la
administración Bush.
Presiones políticas a puertas cerradas
El AGCS, arma económica del Imperio
París (Francia). 24 de febrero de 2005. (Red Voltaire).- Con
la ayuda de varias empresas multinacionales, Estados Unidos trata de imponer
discretamente la modificación de un importante acuerdo comercial.
El Acuerdo General sobre el Comercio de Servicios (AGCS) apunta a la
liberalización
total de las actividades de 160 sectores, entre ellos la salud: tres mil
quinientos millones de dólares a escala mundial y la educación
con dos mil millones de dólares.
El ataque contra el World Trade Center había sido previsto
Las previsiones «inimaginables» de la Rand Corporation
París (Francia). 22 de febrero de 2005. (Red Voltaire).- Financiados
por los fabricantes de armas, los analistas de la estadounidense Rand
Corporation
piden cada vez más dinero para los presupuestos militares. Según
ellos, lo sucedido el 11 de septiembre era inimaginable y constituye una
revolución en materia de terrorismo que justifica la asignación
de créditos ilimitados para luchar contra ese mal. Sin embargo,
ellos mismos habían analizado en detalle lo inconcebible, en marzo
2001, es decir seis meses antes de los atentados de New York ante la Academia
de la US Air Force: un ataque aéreo contra el World Trade Center.
La traición de los intelectuales
Raymond Aron, abogado del atlantismo
Denis Boneau. París (Francia). 6 de febrero de 2005. (Red Voltaire).-
Durante la Guerra Fría, Raymond Aron fue uno de los principales
intermediarios intelectuales de la diplomacia cultural estadounidense en
Francia. Durante más de treinta años participó activamente
en varias operaciones de ingerencia dirigidas por los servicios secretos
de Estados Unidos. Así contribuyó al éxito ideológico
del Congreso por la Libertad de la Cultura. Amigo de Friedrich von Hayek,
consejero de Kissinger, supo dejar, en la estela de su acción intelectual,
una verdadera escuela de pensamiento, liberal, anticomunista y atlantista,
una de cuyas manifestaciones es la Fundación Saint-Simon.
Guerra Fría para dominar el pensamiento
Los New York Intellectuals y la invención del neoconservadurismo
Denis Boneau. París (Francia). 4 de febrero de 2005. (Red Voltaire).-
A partir de 1945, los servicios de propaganda estadounidenses y británicos
reclutan a intelectuales con frecuencia provenientes de medios trotskistas
para inventar y promover una «ideología que rivalice con el
comunismo». Los New York Intellectuals, con Sidney Hook a la cabeza,
cumplen eficaz y celosamente diferentes misiones confiadas por la CIA,
convirtiéndose rápidamente en agentes de primer orden de
la Guerra Fría cultural. Teóricos mayores de este movimiento,
como James Burnham e Irving Kristol, elaboraron la retórica neoconservadora
en la que se basan hoy los «halcones» de Washington.
Capitalismo patronal y anticomunismo
La Hoover Institution, archivos reservados a los republicanos
París (Francia). 3 de febrero de 2005. (Red Voltaire).- Fundada
en la universidad de Stanford por el ex presidente Herbert Hoover, la
institución
que lleva su nombre creó una gigantesca biblioteca sobre las guerras
del siglo XX y los regímenes comunistas. Esta institución
universitaria, financiada por grandes empresas y en la que se encuentran
empleados algunos de los que apuestan por el Partido Republicano, ambiciona
poner la investigación científica al servicio de la defensa
del «sistema norteamericano». Después de haber organizado
la formación de los parlamentarios republicanos, los mejores profesores
de la Hoover y la decana universidad de Stanford, Condoleezza Rice por
ejemplo, crearon el grupo de los «Vulcanos» y formaron a George
W. Bush.
Poder y cultura
El Instituto Aspen educa a los tiburones del business
París (Francia). 3 de febrero de 2005. (Red Voltaire).- Alternando
festivales culturales, enseñanza de humanidades y reflexión
estratégica mundial, el Instituto Aspen no pretende ser ni un think
tank [Centro de investigación, propaganda y divulgación de
ideas, generalmente de carácter político], ni un Davos estadounidense
sino un club destinado a una elite refinada. Tal pretensión intelectual
y artística le permite atraer a dirigentes de Europa y Asia que
detestan la vulgaridad de los nuevos ricos tejanos. El instituto posee
además Wye River, la propiedad donde los presidentes de Estados
Unidos acostumbran a recibir personalidades mundiales, al abrigo de miradas
indiscretas.
Think tank
CSIS, los cruzados del petróleo
París (Francia). 2 de febrero de 2005. (Red Voltaire).- Creado
en 1962 por iniciativa del director de Investigaciones de la CIA, el Centro
de Estudios Estratégicos e Internacionales (CSIS), de Washington,
no tardó en convertirse en el instituto predilecto de los analistas
de la Guerra Fría agrupados alrededor de Henry Kissinger y Zbigniew
Brzezinski. En los años 80, Ronald Reagan reclutó allí
a sus principales asesores para la Defensa y, a principios de los años
90, fue en ese mismo lugar que Bush padre encontró a Dick Cheney,
ministro de Defensa durante su mandato. Multiplicando los análisis
sobre la venidera crisis energética, el CSIS ha evolucionado durante
los últimos años, bajo la presidencia del senador Sam Nunn,
para centrar su atención en la lucha contra el surgimiento de poderes
nucleares, las estrategias petroleras y la guerra de las (...)
Lamentable imperialismo
La Brookings Institution, think tank de buenos sentimientos
París (Francia). 2 de febrero de 2005. (Red Voltaire).- La Brookings
Institution es presentada a menudo como el principal think tank [Centro
de investigación, de propaganda y divulgación de ideas, generalmente
de carácter político] de los demócratas. Se trata
más bien de un organismo representativo de las elites moderadas,
favorables a une regulación económica limitada, en oposición
a los patronos libertarios del American Enterprise Institute. Actualmente
activa en política exterior, aconseja -al igual que los neoconservadores-
el uso de la fuerza, pero por razones humanitarias y no por evangelismo
democrático, como un deber y no por entusiasmo conquistador. La
mitad de sus investigadores trabajaron en el pasado para el Consejo de
Seguridad Nacional o la Casa Blanca.
Pax Americana
La Fundación Carnegie para la paz internacional
París (Francia). 1 de febrero de 2005. (Red Voltaire).- Creada
en 1910 a iniciativa del fabricante de hierro Andrew Carnegie, la fundación
que lleva su nombre se convirtió en el transcurso de un siglo en
uno de los más ricos think tank (centro de investigación,
propaganda y divulgación de ideas, generalmente de carácter
político) del mundo. Dirigida por una larga sucesión de ex
dirigentes de los servicios secretos y orgánicamente vinculada a
unas cincuenta transnacionales, la Carnegie realiza investigaciones en
el campo e la política internacional y promueve las políticas
económicas «liberales» en Rusia y América Latina.
En el corazón de los reaccionarios
El Manhattan Institute, laboratorio del neoconservadurismo
Paul Labarique. París (Francia). 30 de enero de 2005. (Red Voltaire).-
Para difundir el pensamiento libertariano, Sir Anthony Fisher creó
90 institutos en todo el mundo. En el centro de esta telearaña se
encuentra el Manhattan Institute de New York cuyo rol es romper los tabúes.
La «Revolución conservadora» que promueve el instituto
busca eliminar la contracultura de los años 60 y acabar con el feminismo.
Sobre todo, apunta al desmantelamiento de los servicios sociales y por
erradicar a los negros y la populación pobre de la grandes ciudades.
En él fueron elaborados los discursos de la intolerancia moderna
sobre la inadaptabilidad de los negros, la «tolerancia cero»
ante el comportamiento social considerado inadecuado y la «compasión
basada en la fe». Fue en él que se formaron los políticos
republicanos de la costa este, como Rudolf (...)
«Democracia de mercado»
Friedrich von Hayek, el padre del neoliberalismo
Denis Boneau. París (Francia). 30 de enero de 2005. (Red Voltaire).-
El economista austriaco Friedrich von Hayek se ha empeñado en desacreditar
a toda costa la regulación económica alegando que es demasiado
compleja para pretender organizarla. Su teoría del «Estado
mínimo» se ha convertido en la religión del Partido
Republicano de los Estados Unidos en oposición tanto al «New
Deal» de los demócratas como al marxismo de los soviéticos.
Su escuela, financiada por las fundaciones de las grandes transnacionales,
se ha estructurado alrededor de la Sociedad del Monte Peregrino, ha obtenido
siete veces el premio Nobel de Economía y ha inspirado a los gobiernos
de Pinochet, Reagan y Thatcher.
El programa energético de los neoconservadores
El IAGS prepara la economía de EEUU para la guerra
Arthur Lepic. París (Francia). 12 de enero de 2005. (Red Voltaire).-
Los principales líderes neoconservadores se han agrupado en el seno
del IAGS para redactar un programa para la reducción del consumo
de petróleo en los EEUU. El plan no tiene como objetivo reducir
las necesidades, sino diversificar los carburantes durante un corto período.
Su implementación para asegurar el suministro permitiría
a los neoconservadores iniciar nuevas aventuras militares contra Estados
productores de petróleo sin correr el riesgo de perturbar gravemente
la economía norteamericana. Es el signo manifiesto y sin equivoco
de poner nuevamente en práctica una política internacional
de depredación de los recursos energéticos mundiales.
El Centro para la Política de Seguridad
Los manipuladores de Washington
Thierry Meyssan. París (Francia). 11 de enero de 2005. (Red Voltaire).-
Se murmura en las cancillerías que, en Washington, el verdadero
poder se ha desplazado de la Casa Blanca hacia el Centro para la Política
de Seguridad (Center for Security Policy, CSP). Ese think-tank [NdT. Centro
de investigación y divulgación de ideas, generalmente de
carácter político], se jacta de determinar la política
exterior estadounidense desde el 11 de septiembre, pretensión que
algunos juzgan exagerada, aunque no parece infundada. Efectivamente, los
que imponen su punto de vista, en el seno de la actual administración
de Estados Unidos, forman un grupo muy unido que se conformó durante
la guerra fría y se identifica con el CSP. Un recuento histórico
se impone para poder comprender las maniobras internas del poder en Washington
y los verdaderos móviles de los (...)
Bush, Reagan y Heritage
La guerra contra los pobres
Edgar González Ruiz. Ciudad de México (México)
| 10 de octubre de 2004. Agencia IPI. Los gobiernos de Reagan y de los
Bush se han ocupado de alimentar y poner en operación una poderosa
maquinaria de agresión contra varios países del mundo, así
como de llevar a sus límites el puritanismo y la explotación
capitalista. Han sido los apologistas de esas políticas decenas
de “expertos” agrupados en organizaciones como la conservadora Fundación
Heritage.
Delito financiero y golpe de Estado
George Soros, especulador y filántropo
3 de febrero de 2004. (Red Voltaire).- Arquetipo del especulador y profeta
del «post-capitalismo», el financiero y filósofo George
Soros es adulado y temido al mismo tiempo. Responsable de diversos «krachs
de la Bolsa de valores» y mecenas en alrededor de cincuenta países.
Posee en la actualidad una fortuna estimada en 7 mil millones de dólares.
Se declaró dispuesto a financiar las campañas para impedir
la reelección de George W. Bush a pesar que él mismo salvó
a Junior de la quiebra en 1990 y continua trabajando con el padre de éste
en el poderoso grupo financiero Carlyle Group. Igualmente activo en numerosos
cambios de gobiernos, se le acusa de ser la tapadera de la CIA.
Tres personalidades responden : Keith Dixon, José Saramago y
Hernando de Soto
Comprender los lazos históricos y políticos del Neoliberalismo
con la Globalización
Sandro Cruz. Ginebra (Suiza). Abril de 2002. Agencia IPI.- Tres personalidades
entrevistadas para comprender orígenes, redes y objetivos de los
gestores de este pensamiento político y económico que la
Mundialización en su expansión planetaria la ha convertido
en ideología única y suprema. Keith Dixon investigador británico,
José Saramago premio Nóbel de literatura y Hernando de Soto
economista y activista neoliberal responden. Declaraciones recopiladas
por Sandro Cruz, corresponsal en Europa.
http://www.voltairenet.org/mot2089.html?lang=es&debut_article=30#pagination_article
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Operación Northwoods
Cuando el Estado Mayor estadounidense planificaba
atentados terroristas contra su propia población
Por Thierry Meyssan
5 de noviembre de 2001
(Periodista y escritor, presidente de la Red Voltaire con sede en
París, Francia. Es el autor de La gran impostura y del Pentagate)
La operación Northwoods se proponía convencer la comunidad
internacional de que Fidel Castro era tan irresponsable que representaba
un peligro para la paz de occidente. Para ello, se plantea orquestar, y
luego imputar a Cuba graves dañs sufridos por Estados-Unidos.
La Operación Mangoose
En 1958 en Cuba, los rebeldes encabezados por los revolucionarios Fidel
y Raúl Castro, Che Guevara y Camilo Cienfuegos derrocaron al régimen
fantoche de Fulgencio Batista, el cual huye a refugiarse a los EE.UU.
El nuevo gobierno revolucionario, que todavía no es comunista,
pone fin a la explotación sistemática de la isla por un grupo
de multinacionales estadounidenses (Standard Oil, General Motors, ITT,
General Electric, Sheraton, Hilton, United Fruit, Est Indian Co) y los
intereses de la familia Bacardi. Estas empresas que han perdido el gran
negocio de hacerse millonarios explotando al pueblo cubano, convencen al
presidente estadounidense Eisenhower para que derroque a los revolucionarios
cubanos dirigidos por Castro.
El 17 de marzo de 1960, el presidente Eisenhower aprueba un «Programa
de acciones clandestinas contra el régimen castrista». Su
propósito es «sustituir el régimen de Fidel Castro
por otro, más fiel a los verdaderos intereses del pueblo cubano
y más acceptable para los Estados-Unidos, por medios secretos que
no dejen ver una implicación de la intervención militar estadounidense»
[1] .
El 17 de abril del 1961, une unidad de exiliados cubanos y mercenarios,
dirigida más o menos discretamente por la CIA, intentan un desembarco
en la Bahía de Cochinos.
El intento fue un gran fracaso. El presidente John F. Kennedy, recientemente
nombrado como gobernante en la Casa Blanca, se niega a dar la orden para
que la US Air Force apoye a los mercenarios.
1500 hombres quedan prisoneros de las autoridades cubanas. Kennedy desaprueba
el intento y revoca al director de la CIA (Allen Dulles), al vice-director
(Charles Cabell) y al director del Stay-Behind (Richard Bissell).
Encarga a su consejero militar, el general Maxwell Taylor que realize
una investigación interna, que no dará lugar a ninguna acción
concreta. Kennedy se cuestiona sobre la actitud del Estado Mayor Interejércitos,
que había validado esta operación, cuando sabía que
estaba destinada a ser un fracaso [2]. Todo parece haber pasado como si
los generales hubiesen intentado implicar Estados unidos en una guerra
abierta contra Cuba.
El presidente Kennedy a pesar de haber sancionado los métodos
y los fallos de la CIA, no cambió la política de hostilidad
de Washington al régimen de la Habana. Para ello monta un «Grupo
Especial Amplio» encargado de concebir y encabezar la lucha anticastrista.
Este grupo se compone de su hermano, Robert Kennedy (attorney general),
de su consejero militar (el general Maxwell Taylor), del consejero nacional
para la seguridad (Mc Gorge Bundy), del secretario de estado (Dean Rusk),
asistido por un consejero (Alexis Johnson), del secretario de defensa (Robert
McNamara), asistido por un consejero (Roswell Gilpatric), del nuevo director
de la CIA (John McCone), y del jefe de estado mayor interarmas (el general
Lyman L. Lemnitzer).
Este Grupo Especial Amplio imagina un conjunto de acciones secretas
clasificadas bajo el nombre de código secreto de operación
«Mangoose» (Mangosta).
Para realizarlas, la coordinación operacional entre el Departamento
de Estado, el Departamento de Defensa y la CIA es confiada al général
Edward Lansdale (asistante del Secretario de Defensa, encargado de las
Operaciones Especiales, y por lo tanto director de la NSA). Mientras que
en el seno de la CIA, una unidad ad hoc se constituye, el «Grupo
W», dirigido por William Harvey.
Crisis en el seno del Ejército
En abril 1961, el ejercito de Estados-Unidos esta atravesado por una
crisis grave : el mayor general Edwin A. Walker, que originó los
enfrentamientos racistas de Little Rock antes de ser nombrado al mando
de la Infantería US estacionada en Alemania, es revocado por el
presidente Kennedy [3]. Está acusado de desarrollar un proselitismo
de extrema derecha en el ejército. El mismo era miembro de la John
Birch Society y a los auténticos caballeros del Klu Klux Klan.
La Comisión de Asuntos exteriores del Senado abre una investigación
sobre las ramificaciones de los grupos de extrema derecha en el seno del
ejército. Las audiciones sont dirigidas por el senador Albert Gore
(D-Tennessee), padre del futuro vice-presidente americano. Los senadores
sospechan del jefe del Estado Mayor Interejércitos, el général
Lyman L. Lemnitzer, de participar a los movimientos extremistas de Walker.
Gore sabe que Lemnitzer es un especialista de operativos secretos: en
1943, había dirigido en persona las negociaciones que pretendían
enemistar Italia con el Tercer Reich de Adolf Hitler y, en 1944, encabezó
con Allen Dulles las negociaciones secretas con los nazis en Ascona (Suiza)
preparando la capitulación de la Alemania (Operación Sunrise)
[4].
Participó también en la creación de la red «stay-behind»
de los Aliados, utilizando y enrrolando sin verguenza agentes nazis para
luchar contra la URSS, y a la exfiltración de criminales de guerra
y contra la humanidad para que puedan escapar hacia América latina.
_ Pero Gore no logró demostrar su responsabilidad en dichos acontecimientos.
Una correspondencia secreta del general Lemnitzer, recientemente publicada,
muestra que conspiraba junto con el comandante de las Fuerzas Estadounidenses
en Europa (el general Lauris Norstad) y otros oficiales de muy alto rango
para sabotear la política del presidente demócrata John F.
Kennedy.
Los militares extremistas denuncian lanegativa o rechazo de Kennedy
de hacer intervenir militarmente al Ejército USA en Cuba.
Consideran también a los civiles de la CIA, responsables de la
mala planificación del desembarco en la Bahía de Cochinos,
y al presidente Kennedy como un cobarde por no haber permitido el apoyo
de la US Air Force a los contrarevolucionarios cubanos.
Para llevar adelante sus planes, estos militares extremistas estadounidenses
imaginan crear o inventar un pretexto político para que Kennedy
pueda intervenir militarmente en Cuba. _ Este plan, llamado operación
«Northwoods» (Madera del Norte), da lugar a que se realizen
estudios muy precisos -efectuados por el general William H. Craig- con
la finalidad de avanzar en este proyecto secreto. Más tarde el proyecto
es presentado al Grupo Especial Amplio por el general Lemnitzer en persona,
exactamente el 13 de marzo 1962 (nuestro documento).
La reunión se desarrolla en el Pentágono, en el despacho
del Secretario de la Defensa, de las 14h30 (2.30 pm) a las 17h30 (5.30
pm).
La reunión termina de muy mala manera:
Robert McNamara rechaza el plan en bloque, mientras que el general
Lemnitzer se hace cada vez más amenazador. Este hecho provocó
6 meses de hostilidad permanente entre la administración Kennedy
y el Estado Mayor Interejércitos, y dio como resultado que Lemnitzer
sea enviado fuera del país. Se le nombró o recibió
su nominación como jefe de las fuezas de EE.UU en Europa.
Antes de irse, el general ordena destruir todos los documentos secretos
del proyecto Northwoods, pero Robert McNamara, ministro de la Defensa del
presidente Keneddy en esa época, archivó y conservó
una copia del proyecto secreto que le habían transmitido dichos
militares involucrados [5].
Los jefes del Estado Mayor responsables del proyecto Northwoods. De
izquierda a derecha : el almirante George W. Anderson Jr. (jefe des operaciones
navales), el general Goerge H. Decker (jefe de estado-mayor del ejercito
de tierra), el general Leyyman L. Leymnintzer (jefe de estado-mayor interarmas),
el general Curtis E. LeMay (jefes de estado-mayor del ejercito del aire),
el general David M. Shoup (comandante del cuerpo de los marines).
Los jefes de estado-mayor responsables del proyecto Northwoods. De izquierda
a derecha : el almirante George W. Anderson Jr. (jefe des operaciones navales),
el general Goerge H. Decker (jefe de estado-mayor del ejercito de tierra),
el general Leyyman L. Leymnintzer (jefe de estado-mayor interarmas), el
general Curtis E. LeMay (jefes de estado-mayor del ejercito del aire),
el general David M. Shoup (comandante del cuerpo de los marines).
Atentados terroristas
La operación Northwoods se había dado como objetivo convencer
la opinión pública internacional de que Fidel Castro era
tan irresponsable y que representaba un peligro para la paz del occidente
y del mundo. Para ello, se plantea orquestar, y luego imputar a Cuba la
responsabilidad de graves daños terroristas acontecidos en los Estados-Unidos
y contra sus intereses. He aquí algunas de las provocaciones previstas
por los militares norteamericanos:
Atacar la base americana de Guantanamo. La opéración
se realizaría por mercenarios cubanos bajo uniforme de las fuerzas
de Fidel Castro, incluiría varios sabotajes y la explosión
del almacén de municiones, lo que necesariamente provocaría
daños materiales y numerosas muertes entre la tropa estadounidense.
- Hacer explotar un barco de guerra US en aguas territoriales
cubanas, a manera de reavivar la memoria de la destrucción del acorazado
US Maine, en 1898 (266 muertos), que provocó la intervención
americana contra España [6].
El buque estaría en realidad vacío y todo sería
teleguiado. La explosión se vería desde La Habana o de Santiago
para que se disponga o acredite el hecho con testigos oculares. Una operación
de rescate se organizaría para dar más realismo. La lista
de las víctimas se publicaría en la prensa y falsos funerales
serían organizados para suscitar la indignación de la opinión
pública en los EEUU y el mundo. La operación sería
lanzada cuando navíos y aviones cubanos estuviesen en la zona para
poder imputarles el ataque.
Aterrorizar a los exiliados cubanos residentes en los EE.UU organizando
algún bombazo en sus locales de Miami, en Florida y hasta en Washington.
Falsos agentes cubanos serían arrestados para disponer de confesiones.
Falsos documentos comprometedores, establecidos de antemano, serían
embargados y distribuidos a la prensa, para demostrar la implicación
de terroristas cubanos de Fidel Castro.
Mobilizar a las naciones limítrofes de Cuba para que acrediten
una amenaza de invasión. Un falso avión cubano bombardearía
de noche la República Dominicana, u otro Estado de la región.
Las bombas utilizadas serían por supuesto de fabricación
soviética.
Mobilizar la opinión pública internacional, para ello
se había previsto la destrucción de un vuelo espacial habitado.
Para lograr un golpe sensacional que conmueva las mentes, la víctima
escogida habría sido el famoso astronauta John Glenn, primer estadounidense
en haber recorrido una órbita terrestre completa de la Tierra (vuelo
Mercury).
Y en caso que todo esto no fuera suficiente para movilizar la opinión
pública para que apoye la invasión militar de Cuba por el
éjército de los EE.UU, se previó añadir una
última provocación, la cual se estudió muy particularmente,
era:
«Es posible crear un incidente que demuestre de manera convincente
que un avión militar de combate cubano atacó y derribó
un vuelo charter civil procedente de Estados-Unidos y con destino a Jamaica,
Guatemala, Panamá o Venezuela».
Un grupo de pasageros cómplices, qui podrían ser estudiantes
por ejemplo, hubiesen embarcado a bordo de un vuelo charter de una compañía
fantasma bajo control de la CIA. A la altura de Florida, el avión
cruzaría una réplica, un avión aparentemente indéntico,
pero vacío y sin piloto.
Les pasajeros cómplices regresarían a una base secreta
de la CIA, mientras que el avión mantendría aparentemente
su trayectoria. El avión emitiría mensajes de auxilio indicando
que ha sido atacado por la caza cubana, y explotaría en vuelo.
La realización de estas operaciones implica necesariamente la
muerte de numerosos ciudadanos estadounidenses, civiles y militares. Pero
es precisamente el alto costo en vidas humanas que hace de tales acciones
sean eficientes y cumplan su función manipuladora.
Layman L. Lemnitzer, el regreso
Para John F. Kennedy, Lemnitzer es un anticommunista histérico
y fanático, respaldado por multinacionales sín escrúpulos.
_ El nuevo presidente Kennedy entiende entonces el sentido de la advertencia
de su antecesor, el presidente Eisenhower, cuando un año antes,
en su discurso de fin de mandato declaró:
«Los responables del gobierno, tenemos que estar atentos a la
adquisición de una influencia ilegítima, que sea o no proyectada
por el complejo militaro-industrial. El riesgo de poder desarrolar o utilizar
un poder usurpado existe y persistirá.
Jamás debemos permitir que el peso de esta amenaza nos impida
o nos arrebate nuestras libertades y procesos democráticos.
Nada debe considerarse como absolutamente ganado. Sólo una vigilancia
y una consciencia ciudadana puden garantizar el equilibrio entre la influencia
(lobby) de la gigantesca maquinaria industrial y militar de defensa que
hemos desarrollado y nuestros métodos y objetivos pacíficos,
de tal forma que la seguridad y la libertad puedan desarrollarse
harmoniosamente»
[7].
En définitiva, John F. Kennedy, se resiste a los generales Walker,
Lemnitzer y a sus amigos, y se niega a involucrar a los Estados Unidos
de América en una guerra a ultranza o abierta contra el comunismo
en Cuba, en Laos, en Vietnam o donde sea. John Kennedy será asesinado
el 22 de noviembre de 1963. [8].
El general Lemnitzer se jubila en 1969. Pero en 1975, mientras que el
Senado inicia sus investigaciones sobre el rol exacto de la CIA bajo la
administración Nixon, Gerald Ford, que asume el cargo de la presidencia,
desde el éscandalo del Watergate que cesó a Nixon, lo requiere
para que participe a esta investigación.
Después de haber ayudado a enterrar la polémica, Ford
lo solicita de nuevo para animar un grupo de presión (lobby), el
Committee on the Present Danger (CPD - Comité sobre el Peligro Presente).
Esta asociación es un invento de la CIA, entonces dirigida por
George Bush padre. Hace campaña para promover el peligro que representa
el comunismo soviético. Figuran entre sus administratores, varios
reponsables de la CIA y Paul D. Wolfowitz (actual vice-Secretario de Defensa,
en cargo de las operaciones en Afganistán). Paralelamente, Gerald
Ford promueve al cargo de general de brigada al general William H. Craig,
que había dirigido los estudios preliminares de la Operación
Northwoods, como director de la National Security Agency (NSA).
El general Layman L. Lemnitzer muere el 12 de noviembre de 1988.
En 1992, la opinión pública americana se cuestiona sobre
el asesinato del presidente Kennedy después de la difusión
de una película cinematográfica del realizador Oliver Stone
donde demuestra las incoherencias de la versión oficial.
El presidente Clinton ordena la desclasificación de grán
cantidad de archivos del périodo presidencial Kennedy. En los antiguos
documentos archivados del Secretario de Defensa Robert McNamara, Secretario
de Defensa a la época de Kennedy, se encuentra la única copia
existente del proyecto secreto «Northwoods».
[1] A Program of Covert Operations Against the Castro Regime, documento
desclasificado de la CIA del 16 de abril de 1961.
[2] The Chairmen of the Joint Chiefs of Staff, Willard J. Webb et
Ronald H. Cole, DoD, 1989. Swords and Plowshares, Maxwell D. Taylor, 1972.
[3] Ver nuestra investigación «Les Forces spéciales
clandestines», in Les Notes d’information du Réseau Voltaire
n° 235. Parar más amplios detalles, Edwin A. Walker and the
Right Wing in Dallas, por Chris Cravens, South Texas State University,
1993.
[4] Les Secrets d’une reddition, Allen Dulles, Calmann-Lévy,
1967.
[5] Los documentos de la operación Northwoods han sido inicialmente
publicados en Australia por Jon Elliston (Psy War on Cuba, The Declassified
History of US Anti-Castro Propaganda, Ocean Press Ed., 1999) sin provocar
de reacciones en Estados-Unidos. Fueron nuevamente utilizados por el periodista
de ABC News, James Bamford en su historia de la NSA (Body of Secrets, Anatomy
of the Ultra-Secret National Security Agency from the Cold War to the Dawn
of a New Century, Doubleday Ed., 2001) suscitando entonces cierta emoción
entre los historiadores.
[6] Entonces, Cuba era una colonia española. EE.UU intervino
militarmente para poner fin a la colonización española de
Cuba e imponerle un estatuto de protectorado.
[7] Dwight Eisenhower, Farewell Adress, 17 janvier 1961.
[8] JFK, Autopsie d’un crime d’État, William Reymond, Flammarion,
1998.
http://www.voltairenet.org/article120002.html
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Stay behind: cómo controlar
las democraCIAs marionetas
Las redes estadounidenses de
desestabilización e injerencia
Por Thierry Meyssan
20 de julio de 2001
(Periodista y escritor, presidente de la Red Voltaire con sede en
París, Francia. Es el autor de La gran impostura y del Pentagate)
Encargados de instruir el caso del accidente del avión militar
secreto que se estrelló en 1973 en Maghera (Irlanda del Norte) así
como el atentado del coche bomba en la ciudad de Paetano (Italia), los
jueces venecianos Felice Casson y Carlo Mastelloni recopilan testimonios
y documentos que les permitirá de demostrar convincentemente que
un gobierno secreto controló Italia desde la sombra y al margen
de las instituciones oficiales.
Encargados de instruir el caso del accidente del avión militar
secreto que se estrelló en 1973 en la ciudad de Maghera así
como el atentado del coche bomba en la ciudad de Paetano (Italia), los
jueces venecianos Felice Casson y Carlo Mastelloni recopilan testimonios
y documentos que les permitirá de demostrar convincentemente que
un gobierno secreto controló Italia desde la sombra y al margen
de las instituciones oficiales.
Mientras que los jueces convocaban en su oficina a diferentes dirigentes
políticos del país, el presidente del Concejo italiano de
esa entonces, Giulio Andreotti, lanzaba públicamente el 27 de octubre
1990 «una bomba», un comunicado oficial donde autentificaba
la existencia de una tal superestructura: el Gladio.
«Después de la Segunda Guerra Mundial, el miedo del expansionismo
soviético y la inferioridad de las fuerzas de la OTAN con relación
al Kominform (Pacto de Varsovia) condujeron a las naciones de Europa del
Oeste a imaginar nuevas formas de defensa no convencionales, creando en
sus territorios una red oculta de resistencia destinada a actuar en caso
de ocupación enemiga. Su misión: recoger información,
cometer actos de sabotaje, propaganda y actos de guerrilla [...] A la luz
de los recientes y significativos sucesos que han trasformado la Europa
del Este, [caída del muro de Berlín ndlr.] el gobierno se
ha impuesto de reconsiderar todas las disposiciones en materia de guerra
no ortodoxa, de promover y verificar toda iniciativa propia, tanto sobre
el plano político que técnico-militar, la actual validez
y la utilidad de estos sistemas de protección sobre el territorio
nacional».
Las revelaciones estruendosas de Giulio Andreotti dieron motivo para
que la gente se haga la lamentable pregunta: ¿a lo largo de la Guerra
Fría, las democracias occidentales fueron manipuladas por los servicios
especiales de la Alianza Atlántica, hasta el punto que la democracia
en sí no ha sido más que una farsa, señuelo, simulación
y engaño?
Para responder a esta pregunta, comisiones de investigación parlamentarias
fueron creadas en Italia [1], en Suiza [2] y en Bélgica [3]. El
resultado de estas investigaciones [4] era tan lamentable y lastimoso que
algunos países o Estados como Francia, prefirieron hundirse en la
denegación.
La existencia de estas redes de stay-behind de espionaje y de injerencia
era por tanto un secreto conocido. En 1952, la prensa alemana había
revelado las actividades de un grupo de extrema derecha, el
Bundesdeutscherjungend,
cuyos militantes fueron armados por los servicios secretos de la Alianza
Atlántica (OTAN). Su misión era preparar el asesinato de
los principales lideres de la izquierda en caso de una invasión
soviética. La OTAN pensaba así contrarrestar el establecimiento
de un gobierno "títere" impuesto por el Ejército Rojo.
La red stay-behind fue mencionada en 1976 en el informe de la comisión
de investigación parlamentaria de EE.UU. sobre la CIA presidido
por el senador Frank Church [5]. Informaciones más precisas fueron
dadas para conocimiento público en 1978 por el antiguo jefe del
stay-behind y ex director de la CIA, Wiliam Colby, en su autobiografía
[6]. Numerosos detalles han sido publicados en 1982 por el coronel Alfred
H. Paddok [7], antiguo comandante del 4to. Grupo de Acción Psicológica.
En el mismo año 1982, el responsable de la Oficina de Investigaciones
Especiales [8], John Loftus, reveló las condiciones de reclutamiento
de los stay-behind entre los agentes nazis. El periodista e historiador
Gianni Flamini describió sus acciones en Italia en su monumental
obra [9] (1981 a 1984). Finalmente, la redefinición de las acciones
del stay-behind fue oficialmente analizado durante un coloquio organizado
en 1988 por el United States National Strategy Información Center
(Centro Nacional de Información Estratégica de los EE.UU.)
[10]. A pesar de la abundante bibliografía y documentación
de este movimiento, el conjunto de dicha información está
cortada y da una imagen tergiversada del sistema. Documentos del Departamento
de Estado de EE.UU. desclasificados posteriormente y publicados han completado
la información respectiva, dando a conocer que un dispositivo global
de injerencia en la vida democrática de los países aliados.
Esta red de espionaje fue mucho más amplia de lo que se pensaba,
incluso los stay-behind no fueron los únicos en participar.
William Colby (1920-1996). Director de la CIA murió de manera
misteriosa cuando pescaba en su bote después que se jubiló
de la CIA. © Derechos DR
Rastrear la historia de la creación y formación del más
secreto de los servicios secretos no sólo brinda un interés
retrospectivo, sino que permite de descubrir además la cara oculta
de la política occidental desde 1947. Este servicio de espionaje,
cuya existencia ha sido reconocida únicamente para afirmar que perteneció
al pasado, ¿no estaría aún hoy en actividad?
A pesar que se consideró que nunca había existido, ésta
red de espionaje fue disuelta oficialmente tres veces: primero en 1952,
más tarde en 1973 y finalmente en 1990.
¿Y si este servicio de espionaje está aún activo,
manipulando escondidamente las instituciones públicas para los intereses
y fines de un poder oculto? ¿Entonces las democracias occidentales
no serían más que un señuelo que favorece y nutre
el poder de «algunos grandes señores»...?
La creación del stay-behind
Para responder a estas preguntas, es necesario indagar en la Historia.
En los últimos meses de la Segunda Guerra Mundial, el servicio de
contra espionaje estadounidense, la sección X2 de la OSS (Office
of Strategic Services) fue encargada de localizar los agentes nazis dispersos
después de la retirada de la Wehrmacht (ejército alemán).
Los «stay-behind» son los que se quedaron atrás si traducimos
literalmente del inglés, detrás de las líneas enemigas,
generalmente se trataba de espías y saboteadores comandos. En vez
de arrestarlos y fusilarlos, James Jesús Angleton, jefe del X2 y
el general William J. Donovan director de la OSS, decidieron de recuperarlos
y enrolarlos, en la mayor cantidad posible y/o lo máximo que se
pudiera, para reutilizar estos agentes nazis o fascistas en la próxima
Guerra Mundial, aquella que opondría el «mundo libre»
al «peligro comunista» [11]. Habría que actuar rápido,
antes que los movimientos de resistencia identifiquen a estos stay-behind»
y los eliminen.
Esta operación comenzó en Italia con la devolución
del jefe de los escuadrones de la muerte (Decima Mas). El príncipe
Valerio Borghese fue uno de los primeros en revelar los nombres de sus
agentes para salvarlos. Dicha operación fue llevada en todos los
territorios anteriormente ocupados por el Tercer Reich. Así, los
stay-behind franceses fueron identificados y reclutados cuando se operó
el regreso de René Bousquet, secretario general de la policía
francesa colaboracionista con Hitller. Cuando el Eje capitula, la operación
fue extendida en Alemania, lo que hizo posible «recuperar»
al general Reinhard Gehlen, ex jefe del servicio secreto del ejército
alemán en el frente del Este. Después de diez meses de «
tratamiento » en los EE.UU. llevado a cargo por Frank G. Wisner,
Gehlen fue amnistiado y se le confió una nueva misión, la
creación y dirección del Bundesnachrichtendienst (BND), el
servicio secreto de la Alemania Federal [12].
La operación fue planificada por Allan Dulles, jefe de la estación
de la OSS en Berna, Suiza. Dulles que gozaba de experiencia en su cargo
y gracias a sus relaciones informales había logrado desarrollar
contactos desde 1942 con las dos tendencias del partido nazi. Su objetivo
era ahora, al final de la guerra, concluir una paz separada y buscar una
alianza contra el comunismo [13]. Los agentes nazis, fascistas y oustachis
que cumplieron funciones públicas durante la Segunda Guerra ya no
podían ser empleados nuevamente por las administraciones estatales
de Europa, simplemente por su pasado criminal. Toda esta gente fascista
fue enviada y colocada en América Latina, donde podían ser
nuevamente reutilizados. Su infiltración fue llevada a cabo con
la ayuda de la Santa Sede, que compartía su lógica [anticomunista
ndlr.] Trabajo realizado bajo la responsabilidad del Monseñor Giovanni
Battista Montini, futuro Papa bajo el nombre de Pablo VI [14].
En Francia, la selección de los agentes de nacionalidad alemana
fue llevado a cabo en el patio del internado de Coudray-Morancez, seminario
del sacerdote Franz Stock [15].
El sacerdote Franz Stock en foto y estampilla, colaboró reclutando
nazis para las redes de espionaje. Un trámite de beatificación
ha sido iniciado en Roma. © Foto Derechos DR.
En 1946, el presidente Harry S. Truman se consagra a la reconversión
de la economía y de las instituciones de guerra de los EE.UU. Tomando
en cuenta las dificultades que su país encontró durante la
Segunda Guerra Mundial, Truman decide de dotar a los EE.UU. de una industria
de guerra y de servicios secretos permanentes. Esta decisión puede
ser considerada como legitima cuando se demostró la improvisación
en que se hallaba el país durante la guerra. Esta decisión
toma en cuenta la enorme dificultad de reconvertir la gran maquinaria bélica
en una economía de paz. Truman tuvo que resistir a fuertes presiones
políticas viniendo de todos lados, para poder ratificar su decisión.
Según las preconizaciones del general William J. Donovan, director
del OSS, la nueva Agencia Central de Inteligencia (CIA) comenzaría
a sustituir parcialmente y poco a poco los servicios de la Marina, del
Ejército de tierra y de la Secretaria de Estado. Su función
no se resumiría en recoger información, sino que debía
estar capacitada para actuar en el extranjero, violando así la soberanía
de los Estados.
Si Truman estaba de acuerdo con la primera función de la CIA,
no lo estaba con la segunda. Oficialmente, el National Security Act, fue
validado por el Congreso en 1947, perennizando en tiempos de paz un dispositivo
militar general que incluye una agencia de espionaje exterior, la CIA es
desprovista de toda competencia para realizar «operaciones especiales».
La Organización Gehlen en Alemania y la red stay-behind en toda
Europa no habrían tenido en adelante una justificación para
continuar su existencia. De esta manera debieron ser desmanteladas.
Sin embargo, a la ocasión de los debates sobre las condiciones
de ocupación de la Alemania vencida, la conferencia de ministros
de Relaciones Exteriores en Moscú demostró que era casi imposible
a los demás países del mundo, no tomar posición, obligándolos
de esta manera a ubicarse geopolíticamente en el conflicto USA-URSS.
El primer país en escoger su «campo» fue Francia.
Escogió el campo de los Anglo-Estadounidenses. Era el comienzo de
una guerra no declarada y sin operaciones militares convencionales, la
famosa «Guerra Fría».
Dando marcha atrás y de manera ilegal contra lo que fue decidido
en el Congreso de EE.UU., Harry S. Truman constituye en secreto un nuevo
servicio para conducir operaciones de guerra en tiempos de paz. La Organización
Gehlen y la red de stay-behind son los que van a aportar los fundamentos
y cimientos de esta nueva organización secreta.
La única base jurídica de las operaciones especiales es
la National Security Council Directive on Office of Special Projects (NSC
10/2) del 18 de junio 1948. Este documento clasificado «top secret»
fue dado a conocer públicamente solamente 50 años más
tarde [16]. Esta directiva estipulaba que las operaciones de la red debían
ser planificadas y conducidas bajo la autoridad de un Buró administrativo
adjunto a la CIA y sólo en tiempos de guerra y en coordinación
con el Estado Mayor del Ejército.
El jefe de este Buró sería nombrado por el Secretario
de Estado, reconocido a su vez por el director de la CIA y confirmado en
el puesto por el Concejo Nacional de Seguridad. Inicialmente este Buró
disponía de una autonomía completa y no era supeditado a
la CIA, a fin que pudiera beneficiar de un financiamiento legal. En caso
de desacuerdo entre el Buró y el director de la CIA, o desacuerdo
entre el Secretario de Estado y/o el secretario de la Defensa, el litigio
debía ser resuelto únicamente por el Concejo Nacional de
Seguridad.
Cada autoridad respectiva debía designar un oficial de enlace
reconocido por el Buró, trasmitiéndole a esta persona toda
la información necesaria a fin de preservar el secreto y la existencia
del mismo. La competencia del Buró fue definida así: «Todas
las actividades conducidas o apoyadas por el Gobierno [de EE.UU.] contra
los Estados [países] o grupos hostiles, o los apoyos de Estados
[países] o grupos amigos, deben ser planificados y ejecutados de
manera que la responsabilidad de ningún Gobierno [actual y posteriores
de los EE.UU.] pueda aparecer a las personas ajenas y no autorizadas, y
si ellas son descubiertas, el Gobierno de los Estados Unidos pueda denegar
de manera fehaciente toda responsabilidad. Precisamente, tales operaciones
están involucradas en la actividad secreta y en relación
con la propaganda; la guerra económica, la acción preventiva
directa, que incluye el sabotaje, el anti-sabotaje, las medidas de destrucción
y de infiltración; la subversión de Estados [países]
hostiles, donde se incluye la asistencia a los movimientos de resistencia,
a las guerrillas locales y a los grupos de liberación en el exilio;
el apoyo a los elementos anticomunistas locales que se encuentren en los
países amenazados del mundo libre. Estas operaciones no toman en
cuenta los conflictos armados conducidos por las fuerzas armadas militares
reconocidas, las del espionaje y el contraespionaje, la cobertura y el
engaño llevadas por las operaciones militares».
La organización interna de la red a sido definida en un memorando
secreto, redactado por el director principal del Buró y a la atención
del director de la CIA [17]. Está dividido en cinco grupos funcionales:
- El Grupo de guerra psicológica (prensa, radio, rumores,
etc.)
- El Grupo de guerra política (ayuda a la resistencia en los
países comunistas, ayuda a los movimientos en el exilio, ayuda a
los movimientos anticomunistas en los países libres, estímulo
e incitación a los tránsfugas).
- El Grupo de guerra económica (impedimento y trabas en
la adquisición de materiales y de provisiones, manipulación
de los mercados, mercado negro, especulación sobre las monedas,
falsificación de monedas, etc.).
- El Grupo de acción directa preventiva (ayuda a las guerrillas,
sabotaje, contra sabotaje, destrucción, infiltración, agentes
dobles, stay-behind).
- El Grupo «diversos».
Para Truman y su equipo, la nueva guerra no es de tipo convencional
y no la opone los Estados Unidos a la URSS, es de naturaleza política,
económica, psicológica y la enfrenta el Occidente al Comunismo.
Los intereses de los EE.UU. se convierten en la defensa de los valores
de sus «padres fundadores» [18], dándole así
no una dimensión religiosa, sino mística a la Guerra Fría.
Todos los medios debían ser movilizados y aplicados para que los
Occidentales se reconozcan en el campo estadounidense, identificándose
de esta manera al « mundo libre » y preparándose a sacrificarse
por él.
El stay-behind fue y es una arma con un objetivo bien claro en esta
cruzada. La expresión « stay-behind » fue utilizada
por los servicios de espionaje británicos para designar a sus agentes
secretos que se quedaron detrás de las líneas enemigas en
el frente de guerra. Tenían por misión organizar una resistencia
local, recibían ayuda y suministros gracias a los aviones que lanzaban
en paracaídas el material, armas, aparatos de comunicación
y de transmisión para tales fines. Durante la Guerra Fría,
la idea de una ocupación soviética en Europa occidental favoreció
la preparación logística de tal operativo. La idea era también
reclutar una red similar pero a escala atlántica, con ayuda de anticomunistas
acostumbrados a la acción secreta. A parte de los agentes nazis
que fueron enrolados y enviados por la OSS, el Carmel Offie continuó
reclutando personal en los medios de extrema derecha para apoyar la estructura
estadounidense. Respecto a la facción ultramontana [19] de los católicos,
los anglo-americanos llevaron a cabo un acuerdo global con la Santa Sede
por intermedio del cardenal Francis Spellman.
Desarrollo del stay behind
Si los stay behind hubiesen tenido como única finalidad preparar
la resistencia en caso de ocupación enemiga, cada país habría
podido dotarse de una estructura semejante, de su propia iniciativa y bajo
su autoridad. Pero en la medida que se consideraba que los comunistas (o
simpatizantes, gente de izquierda) ocupaban ya parcialmente sobre el plano
ideológico y político un lugar en Europa occidental, era
indispensable que los stay behind escapen a la autoridad de los gobiernos,
gobiernos que el «enemigo» podía tomar por vía
electoral en cualquier momento gracias a las votaciones democráticas.
Con este razonamiento, acuerdos tripartitos fueron firmados entre los
EE.UU., el Reino Unido y cada uno de sus aliados, autorizando a Washington
a actuar en sus territorios, sin que lo sepan, sin su permiso y autorización,
de manera que pudieran defenderlos de la infiltración comunista,
incluso la perfilada por medios legales.
En 1949, los primeros acuerdos fueron integrados en un sistema multilateral
donde hacían parte Bélgica, Holanda, Luxemburgo, Francia
y el Reino Unido. Todo esto estaba administrado por un comité clandestino
llamado de Unión Occidental (el CCUO). Cuando se firmó el
Tratado del Atlántico Norte (OTAN) este sistema fue abierto a nuevos
países, incluso más tarde a países geográficamente
fuera del área de la OTAN. El CCUO se transformó en el Comité
Clandestino de Planificación (CPC Clandestine Planning Committee),
más tarde, en 1958, cambia de nombre para llamarse el Comité
Aliado de Coordinación (ACC Allied Coordination Committee).
El fundamento jurídico de este dispositivo lo suministra los
protocolos secretos del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), a pesar
que no están integrados en la Organización de la OTAN. O
sea que cuando Francia se retiró de la OTAN porque así lo
deseaba el célebre general Charles De Gaulle (retiro que va de 1966
a 1995), esto no implica su retiro del dispositivo secreto. La supervisión
del CCUO-CPC-ACC fue asegurado por los anglo-estadounidenses, que se repartieron
las zonas de influencia: los británicos controlaban Bélgica,
Holanda, Luxemburgo y la península ibérica, los norteamericanos
el resto. La presidencia del Comité «iba girando» entre
cada país miembro.
Según el general Oswald Le Winter, antiguo oficial encargado
del Gladio en el seno de la CIA, confesó que los protocolos adicionales
del Tratado del Atlántico Norte estipulaba que los Estados [países]
miembros renunciaban en perseguir en justicia las actividades y atentados
que sus miembros realizasen. Dichos miembros eran los que componían
los grupos de extrema derecha fascistas utilizados por los servicios de
la organización.
Estos documentos habrían sido firmados por Robert Schuman en
nombre de la Francia, cuando este era presidente del Concejo.
En los Estados Unidos, este servicio secreto al principio recibió
el nombre de Buró para la Coordinación Política (OPC).
Su primer director fue Frank G. Wisner [20]. Este personaje fue escogido
por el Secretario de Estado, el general George Marshall en una lista que
contenía seis nombres y que fue redactada [21] por su consejero
George F. Keenan, el cual mantenía una estrecha relación
con Allan Dulles.
Irving Brown, representante del sindicato AFL-CIO en París y
Norris Chapman, diplomático con puesto en París hacían
parte de la lista.
William Colby describe esa época de la siguiente manera: «
Desbordando de dinamismo y de inteligencia, Wisner no ahorro sus energías
y en algunos meses, con la ayuda de sus antiguos colegas del OSS, puso
en funcionamiento, en el mundo entero, una nueva generación de "Templarios",
encargados de defender la libertad occidental contra el oscurantismo
comunista...y
la guerra».
A comienzos de los años cincuenta, el general Walter B. Smith,
recientemente nombrado director de la CIA, no estaba de acuerdo que el
Buró permanezca en su jurisdicción solamente de manera administrativa.
Smith quería que este se subordinara a su autoridad completamente.
Logró obtener la fusión con la Dirección de la Planificación
de la Agencia en agosto 1952. Las autoridades estadounidenses admitieron
en esa ocasión que la OPC había existido y pretendieron que
dicho organismo acababa de ser disuelto. No podían decir y reconocer
otra cosa, ya que la fusión y las actividades de la ex OPC se mantenían
ilegales.
El general Smith contó con el apoyo de Allan Dulles, antiguo
jefe del OSS y hermano del Secretario de Estado John F. Dulles.
Frank G. Wisner que no logró obtener lo que deseaba, logró
al menos que se le otorgara mejores condiciones, por ejemplo, se le concedió
un Centro de Guerra Psicológica, que fue instalado en Fort Bragg
bajo las ordenes del mayor general Robert A. McClure. Este Psychological
Warfare Center recibió más tarde el nombre de Special Warfare
School (1956-68), para nuevamente cambiar de nombre por el de Institute
for Military Assistence (1969-83), desde 1983 se llama a este mismo centro
el John F. Kennedy Special Warfare Center and School. Fort Bragg ha llegado
a ser una de las bases militares más importantes en el mundo. Es
allí que están estacionadas las unidades especiales de «boinas
verdes».
Según el informe Church, la red contaba ya en 1952 con tres mil
colaboradores, con 47 sucursales en el extranjero y de un presupuesto anual
de 200 millones de dólares. Wisner revindicaba y se jactaba siempre
de las hazañas de sus servicios, cómo la creación
de sindicatos no comunistas en Europa (1947-50), el derrocamiento del presidente
iraní Mossadegh en 1953, el del presidente Jacobo Arbenz en Guatemala
(1954). Operaciones menos exitosas fueron llevadas en Albania, en Ucrania,
en Polonia y en Corea [22]. Los tentáculos de la OPC se movían
igualmente fuera de Europa.
En 1958, Richard M. Bissell remplazó a Frank G. Wisner. Después
Richard M. Helms, Desmond Frizgerald, Thomas H. Karamessines et William
E. Colby.
Desde 1968, el Comité de enlace del (CCUO-CPC-ACC) ha sido fortalecido
con una nueva «articulación» llena de modalidades las
más obscuras, gracias también a una reunión anual
de contactos de servicios secretos europeos: el Club de Berna.
En marzo de 1973, el dispositivo fue nuevamente renovado y la Dirección
tomó la denominación actual de Dirección de Operaciones.
Fue dirigida por William Nelson, por William Wells, John N. McMahon, Max
C. Hugel, John H. Stein, Clair E. George, Richard F. Stolz. Fue durante
este periodo que las actividades del stay-behind fueron reforzadas en América
latina. Una coordinación de servicios argentinos, bolivianos, chilenos,
etc., fue creada en esos lugares para aterrorizar y eliminar a los líderes
de la oposición. Esta coordinación contaba con el apoyo de
los stay-behind españoles, franceses, portugueses, etc., para espionar
y asesinar a aquellos que se fugaban de Europa. Fue por ejemplo la operación
Cóndor, cuya dirección operacional fue confiada a Klaus Barbie,
un nazi refugiado en Bolivia. Los responsables militares latinoamericanos
del stay-behind fueron formados en los EE.UU., en la tristemente célebre
Escuela de las Ameéricas (School of Americas) en Fort Bragg (Georgia).
Desde 2001 esta escuela se llama Western Hemispheric Institute for Security
Cooperation (WHISC) por los mismos profesores provenientes de Fort Bragg.
La Escuela de las Américas fue fuertemente criticada después
que se publicaron sus manuales internos de formación, dónde
se demostró que cursos de tortura eran enseñados.
A la misma vez que funcionaban estas redes, el stay-behind creó
una organización político-militar internacional, la logia
de Propaganda Due (P2), regularmente afiliada al Gran Oriente de Italia.
Ella servía de instrumento para vehicular guerra política
y operaciones especiales.
Licio Gelli, el gran patrón de la P2 había sido oficial
fascista de enlace entre el X2 de la OSS y la agrupación fascista
Decima Mas del príncipe Valerio Borghese cuando el stay-behind estaba
en curso de formación en Italia. Su logia reunía miles de
personalidades del mundo político, de las fuerzas armadas, de la
finanzas, de la Iglesia y del mundo de las artes, de los cuales 923 eran
italianos. Gelli se convirtió en el personaje central del dispositivo
atlántico al punto de ser invitado especial en las ceremonias de
investidura de los presidentes estadounidenses Bush (padre), Carter y Reagan.
El P2 era el puente entre los stay-behind y los agentes de otros grupos
del dispositivo. Fue disuelto y sus miembros debieron enfrentar la justicia
en diferentes tribunales, tanto por su implicación en las tentativas
de Golpes de Estado que por su rol en la bancarrota del Banco Ambrosiano.
Solo las listas de los miembros italianos y argentinos de la logia fueron
publicadas.
Según nuestras informaciones, la logia P2 a sido reconstituida
nuevamente bajo la cobertura de una ONG (Organización No Gubernamental)
suiza de colaboración entre las ciudades del mundo. Esta asociación
dispone en las Naciones Unidas de un estatuto consultativo como las grandes
ONG Greenpeace y Amnistía Internacional. El hijo de Licio Gelli
es el presidente y participó en la última asamblea general
de la ONU.
En 1986, las armas del Gladio, escondidas en contenedores y que estaban
diseminadas en toda Europa fueron remplazadas. La red fue dotada de un
nuevo material de transmisión codificado, el más sofisticado,
el Harpoon. Estas adquisiciones fueron facturadas por los norteamericanos
a cada Estado miembro.
En 1990, estalló en Italia el escándalo del Gladio. Oficialmente
los stay-behind fueron disueltos en toda Europa. En realidad, ellos continuaron
y continúan de funcionar sin haber cambiado en lo absoluto. Primero
bajo la dirección de Thomas A. Twetten y de David Cohen. Actualmente,
el «Plan Maestro» del Pentágono prevé de separar
a corto plazo las actividades de guerra política, económica
y psicológica de las operaciones especiales. De tal manera que los
militares y militantes ya no estarían estacionados en espera de
operaciones comando sino que podrían actuar masivamente en la guerra
especial. Durante los tiempos de paz, todo queda bajo control del Departamento
de Estado de los EE.UU. Todo parece indicar sin embargo, que esta
reestructuración
será difícil en implantar.
Entre otras cosas, se ha creado un nuevo tipo de formación, llamado
Asuntos Civiles. Estos cursos son dados en Fort Bragg y tienen por finalidad
de preparar un personal calificado, aptos a administrar territorios ocupados,
en el cuadro de misiones para el mantenimiento de la paz y maximizar así
la influencia estadounidense [23].
El 12 de noviembre 1990, cuando Italia se encontraba en pleno escándalo
del Gladio, el ministro de la Defensa francés, Jean Pierre Chevènement,
reconoció que un Gladio en Francia había existido. Hablando
«sin decir nada», aseguró que este Gladio francés
siempre se quedó en una fase «durmiente», sin que haya
podido activarse e inmiscuirse en la vida política interna del país.
Poco después de esta declaración, el presidente francés
de la época, Francois Mitterrant indicó que había
ordenado al general Jean Heinrich [24] para que disuelva estas redes dormidas
en tanto que jefe del servicio de acción de la DGSE (Dirección
General de Seguridad del Estado, los servicios secretos franceses).
El stay behind en el mundo
La existencia del stay-behind fue oficialmente reconocida en Alemania,
Austria (red Schwert), en Bélgica, en Dinamarca, en España,
en Francia (Rosa de los vientos), en Grecia (Vellón rojo), en Italia
(Gladio), en Luxemburgo, en Noruega, en Holanda, en Portugal, en el Reino
Unido, en Suecia, en Suiza y en Turquía.
Ninguna investigación fue llevada a cabo dentro de las instituciones
de la Unión Europea, a pesar de la gran cantidad de información
y de los numeroso índices que dejan pensar que un stay-behind controla
los engranajes esenciales de la unión pan-europea.
Se puede citar e imputarle muchos golpes de Estado en el mundo, unos
exitosos, otros fracasados. A parte de los sucesos de 1958 y 1961 en Francia,
los complots de Sogno y de Borghese en Italia, el Golpe de los Coroneles
en Grecia, aquel intentado contra Makarios en Chipre [25].
A estas operaciones de gran envergadura, conviene de añadir aquellas
de desestabilización política y de asesinatos como la del
Primer ministro sueco Olof Palme.
[1] Relazione sulla vicenda « Gladio » presentatat dal
Presidente del Consiglio dei Ministri (Andreotti) communicata alla Presidenza
il 26 febbraio 1991, Senato della Repubblica, X Legislativa, Doc XXVII,
n° 6.
[2] Informe de la Comisión de investigación Parlamentaria
encargada de elucidar los hechos en gran parte acontecidos en el departamento
militar federal, 1990.
[3] Informe de la Comisión de investigación parlamentaria
sobre la existencia en Bélgica de una red de espionaje clandestino
internacional. Senado. 1ro de octubre 1991, n° 1117-4.
[4] Gladio, bajo la dirección de J. Willems, EPO ediciones.,
1991 ; Gladio, Das Erbe des Kalten Kriesges, A. Müller, 1991 ; El
caso Gladio, las redes secretas norteamericanas corazón del terrorismo
en Europa, Jean-François Brozzu-Gentile, Albin Michel, 1994. Ver
también el remarcable documental de Allan Francovitch, Gladio, los
que llevan el juego, Observer Film Company, 1992.
[5] US Congress, Senate, Select Committee to Study Governmental Operations
with Respect to Intelligence Activities, Final Report, 94 th Cong., 2d
sess., 1976. Extractos del informe Church fueron publicados en versión
francesa en Les Complots de la CIA, manipulaciones y asesinatos, Stock,
1976. No toman en cuenta los pasajes relativos al Gladio contenidos en
los libros I y IV del informe.
[6] Honorable Men, my Life in the CIA, traducido en francés
bajo el título 30 años de CIA, William Colby, Presses de
la Renaissance, 1978.
[7] US Special Warfare : its origins, Alfred H. Paddock, National
Defence University Press, 1982.
[8] The Belarus Secret, 1982. Versión francesa : Horrible
secreto, cuando los norteamericanos reclutaban espías nazis. De
Gehlen à Klaus Barbie. John Loftus, Plon, 1985.
[9] Il partido del golpe. Le strategie della tensione e del terrore
dal primo centrosinistra organico al sequestro Moro, Gianni Flamini, Italo
Bovolenta, 4 vol., 1981 à 1984.
[10] Political Warfare and Psychological Operations, Rethinking the
US Approach, US National Strategy Information Center, National Defence
University Press, 1989.
[11] OSS. The Secret History of America’s First Central Intelligence
Agency, Tom Brower, University of California Press, 1972.
[12] La Organización Gehlen, Richard Gehlen, Presses de la
Cité et Fayard, 1972. Una versión corta fue publicada por
las ediciones Saint Clair en 1975. Esta versión fue realizada por
un miembro del stay-behind, el negacionista David Irving.
[13] Violando la Carta del Atlántico, el OSS tomó contacto
con los dignatarios del Tercer Reich y de la Colaboración para negociar
una paz y rendición separada USA-Alemania y a la vez una alianza
contra la URSS. Se trataba de esta manera de voltear la lógica cínica
del pacto soviético-germano. La mayor parte de estos contactos tuvieron
lugar en Berna, otros en la península ibérica. Entre 1942-43,
Allan Dulles recibió en Suiza las visitas de André Bettencourt,
Pierre Guilhain de Bénouville et Francois Mitterant.
[14] Futuro Papa bajo el nombre de Pablo VI.
[15] Una gran misa fue celebrada en la ciudad francesa de Chartres
con motivo del 50 aniversario del fallecimiento del padre Franz Stock.
La ceremonia contó con la presencia del canciller Helmut Kolh de
la Alemania Federal y del presidente del Senado francés René
Maunory. Por este acontecimiento el canciller Kohl publicó en el
prestigioso diario parisino Le Monde una nota con fecha del 25 de febrero
1998, la nota en un homenaje al sacerdote Stock, precursor de la reconciliación
europea. Un trámite de beatificación ha sido iniciado en
Roma.
[16] Foreign Relations of the United States, 1945-1950 Emergence
of the Intelligence Establishment, Governement Printing Office, 1996.
[17] Op. cit.
[18] Los «padres fundadores» son los puritanos exiliados
por la Corona Inglesa que llegaron a América del Norte en busca
de una «tierra prometida». El Nuevo Mundo «descubierto»
por Cristóbal Colón.
[19] Los ultramontanos son católicos que defienden la política
del Papa y en contra de los intereses de las Iglesias católicas
locales.
[20] Frank G. Wisner dirigió el stay-behind desde su creación
en 1958. Cayó en el alcoholismo y se habría suicidado en
1965.
[21] Memorandum con fecha del 30 junio 1948 in Foreign Relations
of the United States, 1945-1950 Emergence of the Intelligence Establishment,
Governement Printing Office, 1996.
[22] Sobre estas operaciones, cf. The Use of Covert Paramilitary
Activity as a Policy Tool : An Analysis of Operations Conducted by the
US CIA, 1949-1951, Major D. H. Berger, US Marine Corps Command ediciones.
[23] Las Acciones civiles-militares. La urgencia al desarrollo :
¿cuáles son los instrumentos para Francia? Informe n°
3167, presentado por Robert Gaïa el 20 junio 2001, Asamblea nacional,
Comisión de la Defensa. «Ce rapport cite en exemple pour la
France la cohérence de la doctrine américaine».
[24] En 1998, el general Jean Heinrich rechazó su quinta 5ta
estrella y renunció al Ejército. Dirige hoy en día
la sociedad de seguridad Geos que emplea a muchos antiguos soldados de
la 11 regimiento de Choque.
[25] The Cyprus Conspiracy. America, Espionnage and the Turkish Invasion,
Brendan O’Malley and Ian Graig, Tauris & Co éd., 2001.
http://www.voltairenet.org/article120005.html
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Guerra fría psicológica
Las ciencias de la dominación mundial
Por Denis Boneau
7 de marzo de 2005
(Periodista francés, miembro de la sección francesa de
la Red Voltaire)
Las ciencias de la comunicación, cuyo desarrollo ha dirigido
la CIA a partir de los años 50, han sido un instrumento esencial
de la «guerra psicológica» contra los gobiernos prosoviéticos
y los países resistiendo al dominio de los EEUU. En colaboración
entre el ejército US y los servicios secretos, los especialistas
del comportamiento ayudaron a recoger información sobre «el
enemigo», a elaborar la propaganda atlantista (OTAN), a prevenir
el surgimiento de movimientos de liberación hostiles a Washington,
llegando incluso a servir de consejeros a los expertos en torturas. Esta
«alianza entre lo científico y lo político» dio
lugar a un dispositivo que aún se utiliza hoy en día para
difundir la voz de Estados Unidos por el mundo.
A partir de 1945, los presidentes Harry Truman [1] y Dwight Eisenhower
[2] institucionalizan las agencias de propaganda creadas durante la Segunda
Guerra Mundial y les asignan como nueva misión la lucha contra la
Unión Soviética y las repúblicas socialistas, a las
cuales las designan como países satélites.
La estrategia general que elaboraron Truman y sus consejeros, llamada
«containment», consiste en bloquear la expansión del
comunismo mediante el control de los movimientos de emancipación
nacional que pudieran tener la intención de llevar al poder a dirigentes
prosoviéticos o prosocialistas. Este ambicioso proyecto exige la
colaboración de expertos capaces de proveer datos geográficos,
económicos, culturales, psicológicos y sociológicos
que puedan ser explotados por el ejército y los servicios secretos.
En ese contexto, ciertos especialistas de «ciencias» del
comportamiento, algunos de los cuales habían sido utilizados ya
contra el Tercer Reich, son enrolados en los nuevos servicios de propaganda
de la Guerra Fría.
Ya en noviembre de 1945, el general John Magruder propone confiar a
la inteligencia militar un ambicioso proyecto de propaganda «en tiempo
de paz» basado en el aporte de las ciencias humanas. Pero su iniciativa
no logra convencer al presidente estadounidense Truman quien decide el
desmantelamiento del OSS [3] de «Wild Bill» Donovan, protegido
de Roosevelt.
Siguiendo la misma lógica, el Buró de Información
de Guerra (OWI) [4], acusado de haber favorecido la reelección de
Roosevelt en 1944, es disuelto. En enero de 1946, Truman establece el Grupo
Central de Inteligencia (CIG) que se convierte en la Agencia Central de
Inteligencia (CIA) algunas semanas después.
Las operaciones son inconfesables e inimaginables: -«propaganda,
guerra económica, acción directa preventiva, sabotaje, antisabotaje,
demolición, subversión contra los Estados hostiles, asistencia
a movimientos de liberación clandestinos, guerrilla, asesinatos,
apoyo a grupos indígenas que combatan los países enemigos
del “mundo libre”...» son confiadas a la OPC [5], dirigida por un
veterano del OSS, Franck Wisner. Teóricamente la OPC depende de
la CIA.
En la practica Wisner, bajo la complaciente autoridad de George Kennan,
dispone de una libertad de acción más que amplia. La OPC
se encarga de una parte substancial de las operaciones de «guerra
psicológica». Wisner recluta para ello científicos
que garantizarán la búsqueda de datos y se encargarán
de convencer a intelectuales «neutros» y, claro está,
de elaborar la propaganda atlantista (de la OTAN).
¿Qué es la guerra psicológica?
Las operaciones psicológicas designan un conjunto muy amplio
de actividades que van de la propaganda radial a la tortura y demandan
conocimientos profundos sobre las poblaciones a las que van dirigidas.
En un documento redactado en 1948, las fuerzas terrestres estadounidenses
definen así la «guerra psicológica»: «[Esta]
emplea medios físicos o morales diferentes a las técnicas
militares ortodoxas, medios que buscan:
- Destruir la voluntad y la capacidad combativa del enemigo.
- Privarlo del apoyo de sus aliados.
- Acrecentar entre nuestras tropas y las de nuestros aliados
la voluntad de vencer.
La guerra psicológica utiliza toda arma que pueda influenciar
la voluntad del enemigo. Las armas son psicológicas solamente por
el efecto que producen y no por su naturaleza misma. Por ello, la propaganda
abierta (blanca), secreta (negra) o gris -subversión, sabotaje,
asesinatos, operaciones especiales, guerrilla, espionaje, presiones políticas,
culturales, económicas y raciales- son consideradas como armas utilizables
[en el marco de la guerra psicológica]».
Para llevar a cabo este programa de «guerra psicológica»,
los servicios secretos reclutan especialistas de las ciencias del comportamiento
capaces de inventar la propaganda blanca «simple, clara y repetitiva»
y la propaganda negra destinada a sembrar en el campo del adversario «el
desorden, la confusión... el terror».
Proyectos Troy y Camelot
El proyecto Troy consiste en movilizar investigadores para definir los
diferentes medios disponibles para difundir la «Verdad» (la
propaganda estadounidense) del otro lado de la Cortina de Hierro (3). El
objetivo es reforzar el dispositivo de la Voice of America (VOA), red de
radiodifusión creada por el International Information Service (IIS),
un organismo que estableció Truman para reemplazar el OWI.
Voice of America es una operación de propaganda «blanca».
Su objetivo es la promoción de Estados Unidos («Democracia»,
«American way of life», «Libertad» son, claro está,
los principales leitmotiv del discurso de la VOA). En el punto de partida
del proyecto Troy está James Webb, consejero del secretario de Estado
Dean Acheson y partidario precoz de la «guerra psicológica».
Weeb aconseja el acercamiento entre expertos universitarios y el gobierno.
Los científicos del proyecto Troy establecen un informe donde
afirman que Voice of America no bastará para penetrar la Cortina
de Hierro. Ante este relativo fracaso, aconsejan otros medios. El proyecto
Troy debía concentrarse inicialmente en la radiodifusión
y el lanzamiento de propaganda mediante globos.
Yendo más allá de los objetivos que proponen sus mecenas
-la fuerza aérea, la marina de guerra y probablemente la CIA-, los
expertos proponen otros canales para vehicular la propaganda «blanca»:
intercambios universitarios, publicación de libros... y apuntan
que la información puede propagarse utilizando simplemente el correo
y mediante diarios profesionales u otras publicaciones comerciales e
industriales.
El estudio incluye recomendaciones prácticas muy precisas. Los
miembros del proyecto Troy [6] aconsejan, por ejemplo, centralizar las
operaciones de propaganda. Siguiendo esa opinión, Truman establece
el Psychological Strategy Board, intensifica los estudios sobre la «sociedad
soviética» [programa de entrevistas con disidentes] y favorece
la creación del CENIS [7].
Esta primera colaboración de gran envergadura prefigura operaciones
similares. La fuerza aérea pide, en 1950, un informe sobre la población
coreana. Wilbur Schramm (considerado como el padre fundador del paradigma
de la comunicación de masas), John Ridley y Fredericks Williams
reciben la misión de entrevistar refugiados anticomunistas para
elaborar una táctica de propaganda en Corea.
El estudio da lugar a dos tipos de documentos: publicaciones en Public
Opinion Quaterly (POQ), la revista oficial de los partidarios de la «guerra
psicológica», un libro intitulado The Reds Take a City así
como un informe secreto destinado a las fuerzas terrestres.
Otra expresión de la «guerra psicológica»,
el proyecto Camelot, consiste, en los años 60, en establecer modelos
sobre los procesos que conducen a revoluciones nacionales en los países
del Tercer Mundo para facilitar la dirección de operaciones de
contra-insurrección.
Camelot ilustra a la perfección la intensificación de
las relaciones entre los estudiosos del comportamiento y los servicios
secretos estadounidenses. Emprendido en 1963, este proyecto, destinado
a facilitar las intervenciones en Yemen, Cuba y el Congo belga, debe
-teóricamente-
permitir prever y prevenir el riesgo de revolución.
En Chile, algunos diarios de izquierda denuncian la implicación
del gobierno estadounidense, que dirige Camelot mediante la Organización
de Investigación de Operaciones Especiales (SORO). El «plan
de espionaje yanqui» fracasa parcialmente ya que, al parecer, las
conclusiones del estudio servirán a los servicios secretos estadounidenses
para derrocar a Allende y establecer en Chile la junta del general Pinochet
[8].
Enrolar a los universitarios
El entendimiento entre un grupo de universitarios y las fuerzas terrestres
permite la aparición de una nueva ciencia concebida como un instrumento
destinado a los servicios secretos. Las ciencias de la comunicación
y el paradigma de «la comunicación de masas», financiados
por créditos de la fuerza aérea, la marina de guerra, la
CIA, el Departamento de Estado (...) aportan numerosos elementos útiles
con el fin de elaborar una propaganda eficaz que debe atravesar la Cortina
de Hierro por diferentes vías (volantes, radiodifusión...).
El campo de estudio de la disciplina es amplio: técnicas de persuasión,
sondeos de opinión, interrogatorios, movilizaciones políticas
y militares, propagación de ideología...
Para satisfacer la demanda de datos científicos se toma la decisión
de financiar varios centros:
- Bureau of Applied Social Research (BASR), de Paul Lazarsfeld,
instalado en la universidad de Columbia.
- Institute for International Social Research (IISR), de Hadley
Cantril.
- Center for International Studies (CENIS), de Ithiel de Sola
Pool (Instituto Tecnológico de Massachussets) cuyos fondos, distribuidos
por la Fundación Ford [9], provienen en realidad de la CIA.
- Bureau of Social Science Research (BSSR), financiado directamente
por la CIA que desea perfeccionar las técnicas de interrogatorio.
O sea, se concibe la tortura como un campo de investigación de
las ciencias sociales [10]. A partir de la guerra de Corea, se le encarga
al BSSR, principal centro de investigación de la propaganda «negra»,
la realización de diferentes estudios a pedido del ejército.
Se trata esencialmente de determinar los «blancos y factores de
vulnerabilidad» de las poblaciones de Europa del Este teniendo el
cuidado de definir diferentes «aspectos de la violencia psicológica».
Concretamente, el BSSR elabora informes sobre los efectos de las técnicas
tradicionales de interrogatorio de prisioneros -descargas eléctricas,
golpes, drogas... Financiados por la CIA (50% del presupuesto social del
centro), estos estudios permiten recoger información, específicamente
sobre las poblaciones de Vietnam y de África, con el objetivo explícito
de mejorar la eficacia de la tortura [11].
Una revista: Public Opinion Quarterly
En 1937, De Witt Poole, de la universidad de Princeton, crea la revista
Public Opinion Quarterly (POQ). Esta publica artículos de «guerra
psicológica», provenientes sobre todo del OWI, estudios sobre
el estado moral de los civiles alemanes durante la guerra, ensayos sobre
el entrenamiento de las tropas, reflexiones sobre la propaganda de guerra...
Ciertas investigaciones parecen inspiradas directamente en las preocupaciones
de los servicios secretos y las agencias de propaganda (sondeos de opinión
en Francia e Italia...)
Paul Lazarsfeld
El consejo de administración de la revista se compone de especialistas
que participan en el proyecto psicológico de la CIA: Paul Lazarsfeld,
Hadley Cantril, Rensis Likert y De Witt Poole (que se convertirá
más tarde en el presidente del National Committee for Free Europe).
El estudio de los sistemas de comunicación de los países
que domina la Unión Soviética o que podrían ser conquistados
por grupos comunistas permita recoger informaciones que los estrategas
de las fuerzas terrestres pueden utilizar inmediatamente, así como
indicaciones -a veces muy precisas- sobre las modalidades de propagación
de la propaganda «blanca» y los métodos «negros»
de difusión del terror. Las ciencias de la comunicación,
concebidas como medios de vigilancia y de coerción, tienen por consiguiente
una vocación puramente manipuladora.
Las ciencias de la coerción contra el neutralismo
El paradigma de la comunicación de masas, surgido del financiamiento
de los servicios de la Guerra Fría, se inserta en un plan intelectual
más amplio que consiste en dividir el mapa del mundo según
la lógica maniquea de los estrategas estadounidenses. Las tesis
que defiende el patriarca de esta disciplina, Wilbur Schramm, dan una
perspectiva
de esta dimensión reductora de las ciencias de la comunicación.
El sistema de Schramm (como el de Leo Strauss) se basa en el antagonismo
«good guys / bad guys» (buenos y malos). Ese principio moral
(el comunismo simboliza el Mal y Estados Unidos el Bien) es compartido
por la mayoría de los intelectuales o científicos comprometidos
con el gobierno estadounidense en la lucha contra la expansión soviética.
En esta lucha maniquea, el neutralismo se ve obligatoriamente como una
traición.
Más que convencer a los partidarios del comunismo, el combate
intelectual consiste en implicar a los neutrales. En el Congreso por la
Libertad de la Cultura, los New York Intellectuals seguidos por una multitud
de defensores europeos del atlantismo, como Raymond Aron, en Francia señalan
el neutralismo como blanco fundamental de «su» trabajo.
Los especialistas de la comunicación trabajan también
a favor de ese plan general concebido por la CIA y la OPC. En un artículo
publicado en POQ, Daniel Lemer se interroga sobre los diferentes aspectos
del neutralismo y elabora un retrato tipo de los individuos que forman
parte de esta categoría. A la pregunta ¿Cómo reconocer
a un neutral?, el autor responde: «[Para un neutral] escoger entre
Estados Unidos y la URSS no es lo mismo que escoger entre la libertad y
la esclavitud». Lemer establece varios síntomas de neutralismo:
«Paz, seguridad, distensión de las relaciones internacionales».
Más allá del parecido entre las líneas ideológicas
de la «guerra psicológica» y las del Congreso por la
Libertad de la Cultura que muestran la coherencia relativa del plan concebido
por Wisner y los dirigentes de la CIA, se puede notar que los especialistas
de la «manipulación de masas» son frecuentemente marxistas
arrepentidos. Un ejemplo de ello es la carrera de Paul Lazarsfeld. A fines
de los años 20, el que será uno de los principales ideólogos
de la «comunicación de masas» es un socialista activo.
En Francia, tiene relaciones con la SFIO y con Leo Lagrange. En 1932,
la Fundación Rockefeller le ofrece una beca de dos años para
estudiar en Estados Unidos. Considerando que existe «una correspondencia
metodológica entre la compra de jabón y el voto socialista»,
se da a conocer escribiendo artículos de marketing.
El gobierno y los servicios secretos reparan rápidamente en él
y colabora en un programa de investigación sobre los efectos de
la radiodifusión (el Radio Research Program) financiado por la Fundación
Ford y fundado por el BASR, cuya fuente de financiamiento son esencialmente
los contratos del ejército y de la CIA.
En 1951, es nombrado consejero para las Ciencias Sociales en la Fundación
Ford. Facilita entonces la creación en Austria de un Instituto de
Estudios Avanzados en Ciencias Sociales y el comienzo de un programa de
intercambio con Yugoslavia y Polonia. En los años 60, se le asignan
puestos de experto ante la UNESCO y la OCDE [12].
Paul Lazarsfeld rompió, por tanto, con los grupos socialistas
para incorporarse a los equipos científicos de la «guerra
psicológica». Pero no es el único que siguió
ese camino, digno de los New York Intellectuals [13]. Leo Lowenthal, uno
de los principales colaborares de POQ, también participó
activamente en la elaboración de técnicas «psicológicas»
para combatir a sus ex-amigos marxistas.
El terreno científico de los «estudiosos del comportamiento»
es el estudio de los sistemas de comunicación de los países
«de riesgo». Por consiguiente, no tiene nada de sorprendente
el que la historia de esa disciplina esté ligada a conflictos (Corea,
Vietnam... y, secretamente, Chile y Angola...) en los que interviene Estados
Unidos durante la Guerra Fría.
Vigencia de la «guerra psicológica»
El dispositivo creado por Wisner se mantuvo al término de la
Guerra Fría. Paralelamente al reclutamiento de los «estudiosos
del comportamiento», la CIA financió la creación de
numerosos centros de investigación internacional o «area studies»
con el objetivo de producir información sobre las zonas geográficas
«de riesgo».
Ya en 1947, la Fundación Carnegie provee los fondos necesarios
para la creación del Centro de Investigaciones sobre Rusia (Russian
Research Center). A partir de 1953, una de las principales pantallas de
la CIA, la Fundación Ford, procura fondos a 34 universidades para
que se desarrollen en ellas investigaciones internacionales.
Este proyecto se extiende más allá de Estados Unidos.
La Fundación Rockfeller financia, verificando cuidadosamente la
etiqueta política de los investigadores subvencionados, diferentes
centros de «Area studies» en Francia. La VIª Sección
de la Escuela Práctica de Altos Estudios, que se convertirá
más tarde en Escuela de Altos Estudios de Ciencias Sociales (EHESS),
acoge equipos de investigadores que generan trabajos sobre China, Rusia
y otras regiones de interés para los servicios estadounidenses.
Aún hoy, los estudios internacionales siguen estando entre las preocupaciones
esenciales de la EHESS.
Asimismo, la Voice of America, la red de radiodifusión de la
propaganda estadounidense -juguete favorito de los estudiosos del comportamiento
del proyecto Troy- sigue en activo. La ley, votada por el Congreso en 1960,
que promulgó el presidente Ford estipula: «La comunicación
directa [la propaganda blanca] por radio con los pueblos del mundo sirve
a largo plazo a los intereses de Estados Unidos (...) Las noticias de la
VOA serán precisas, objetivas y completas (...) La VOA presentará
la política de Estados Unidos de manera clara y eficaz (!)»
Difundidos mediante el transmisor de Greenville (Carolina del Norte),
los programas de la VOA se destinan actualmente a los países africanos
y parecen dirigidos esencialmente a servir de contrapeso a la influencia
francesa en la región (la VOA estableció además un
servicio en idioma francés en 1960).
Proclamando su independencia, la VOA concluya así su carta: «En
el mundo, y específicamente en África, la radio sigue siendo
el principal medio de acceso a la información. Hoy como ayer (sic),
nuestro objetivo es presentar programas que contengan informaciones fiables
e imparciales, con las cuales deben poder contar nuestros oyentes».
De manera general, las ciencias de la comunicación favorecieron
el surgimiento de una nueva forma de propaganda de guerra adaptada a la
Guerra Fría, o sea concebida no para un afrontamiento clásico
sino a la vez para la batalla ideológica Este-Oeste y los conflictos
de baja intensidad que tuvieron lugar en el Tercer Mundo.
En 2001, la administración de George W. Bush reactivó
el conjunto de dispositivos de la Guerra Fría, no para luchar contra
la Unión Soviética sino para imponer un Nuevo Orden Mundial.
A partir de los atentados del 11 de septiembre 2001, la justificación
de esta reactivación han sido las necesidades de la «guerra
contra el terrorismo».
En ese contexto, la CIA recurre de nuevo a las universidades. El director
de investigaciones científicas en el seno de la Agencia, John Philips,
tomó el control del Rochester Institute of Technology; Michael Crowl,
subdirector de la sociedad de economía mixta de la CIA en el sector
informático, se convirtió en rector de la universidad de
Arizona; mientras que Robert Gates (ex-patrón de la CIA bajo Bush
padre) dirige actualmente la Texas A&M University.
[1] Presidente democrata de los EEUU (1884-1972), remplazó
a Roosevelt y ordenó arrojar la bomba atómica sobre Japón.
Apoyo la Guerra Fría y desarrolló una política agresiva
frente a la Unión Soviética y la China comunista
[2] General y presidente republicano de los EEUU (1890-1969), comandante
en jefe de la OTAN
[3] La OSS (Office of Strategic Services) es un servicio secreto
de inteligencia y acción exterior, establecido durante la Segunda
Guerra Mundial. Utilizó a personalidades de las ciencias sociales
como Herbert Marcuse o Margaret Mead.
[4] El Office of War Information se encontraba bajo la dirección
de Elmer Davis.
[5] La OPC (Office of Policy Coordination) es la estructura directiva
de la red «stay-behind». Ver: «Stay-behind: Las redes
estadounidenses de desestabilización y de injerencia» por
Thierry Meyssan, Voltaire, 20 de julio de 2001.
[6] Alan Needell, «Project Troy and the Cold war annexation»,
in Universities and Empire, Money and politics in the social sciences during
the Cold war, The New Press, 1998.
[7] El Center for International Studies (CENIS) es un departamento
del célebre MIT (Massachusetts Institute of Technology) dirigido
por Max Millikan.
[8] Ellen Herman, «Project Camelot and the Career of Cold War
Psychology», ibid.
[9] «La Fundación Ford, fachada filantrópica
de la CIA», Voltaire, 31 de enero de 2005.
[10] «Los manuales de tortura del ejército de los Estados
Unidos» por Arthur Lepic, Voltaire, 8 de junio de 2004.
[11] Christopher Simpson, Science of Coercion, Communication Research
and Psychological Warfare, 1945-1960, Oxford University Press, 1994.
[12] Michael Pollack, «Paul Lazarsfeld, fondateur d’une multinationale
scientifique» (Paul lazarsfeld fundador de una multinacional científica),
in Actes de la recherche en sciences sociales, n° 25, enero de 1979.
[13] «Los New York Intellectuals y la invención del
neoconservadurismo» por Denis Boneau, Voltaire, 4 de febrero de 2000.
http://www.voltairenet.org/article124110.html
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