[  Los Rayos de Argentina  ]


Por Aldebarán 

Introducción

Los lectores de Alice Bailey saben que las naciones se expresan energéticamente a través de rayos, los cuales aportan condicionamientos cuando operan negativamente y constituyen indicadores de su sana irradiación, cuando lo hacen positivamente. Al respecto se dice en El Destino de las Naciones (1969: 39): cada nación está controlada por un rayo de la personalidad, potencia dominante y principal factor controlador en la actualidad, y por un rayo del alma, percibido únicamente por los discípulos y aspirantes de la nación respectiva. Este rayo del alma debe ser evocado por el nuevo grupo de servidores del mundo para acrecentar su actividad funcionante, pues es uno de sus principales objetivos y tareas.

En la misma obra se brinda una lista de un acotado número de países, y Argentina aparece allí nombrada junto a Brasil (p. 53). Sorprende la exactitud del Ascendente –que es situado en Libra– ya que en la época que se publicó el libro no era una información muy difundida. El Ascendente es acompañado por el Sol en Cáncer, debido a  la independencia el 9 de julio de 1816. Sin embargo, y a diferencia de otros países (como el propio Brasil), no son dados los rayos.

Luego de un período de observación, considero que es posible proponer que los rayos de Argentina son los siguientes:

Alma: 1º rayo, Voluntad o Poder. El rayo que aísla, destruye, afirma el Uno y libera.

Personalidad: 6º rayo, Devoción e Idealismo. La energía de la aspiración y el fanatismo; los sueños, la consagración y la pasión.

Mente: 4º rayo, Armonía a través del Conflicto. Otorga pensamiento en base a la dualidad, creatividad, brillo, sentido de la belleza.

Emociones: 6º rayo. A este nivel, provee apasionamiento e intensidad emocional.

Físico: difícil de esclarecer, podría ser un 7º de Orden Ceremonial y Magia, por los principios generales.

Vale asimismo acotar que otros dos autores se refieren al tema: Benjamin Creme propone 1º/6º en su tabla de rayos y naciones, y Vicente Beltrán Anglada habla de un 1º rayo de forma genérica en la conferencia dada en Buenos Aires el 7 de diciembre de 1985.

 

Algunas implicancias

Ante todo, y comenzando por lo más general, se aprecia claramente la tendencia a los rayos pares que tiene el país (6-4-6), lo cual se encuentra en franco contraste con la energía del alma, que es de 1º rayo. Ello implica que el alma tendrá dificultades para controlar a la personalidad, ya que ésta no se encuentra en la misma línea energética.

Se sigue de lo anterior que la personalidad muchas veces actuará por sus propios impulsos, emocionales en su gran mayoría. La línea 4º de mente y 6º de emociones sugiere asimismo que muchas veces el comportamiento puede ser kama-manásico, esto es, revestir emociones con ideas (“justificar”) y luego seguirlas, más que guiarse por la racionalidad. Desde una perspectiva opuesta, a futuro esta afinidad puede facilitar la expresión.

Otra implicancia de la combinación dada es su falta de disciplina, atento a la ausencia de rayos “duros” como el 5º o el 7º, de expresión más concreta, cuidadosa y detallista.

Pasando a los vehículos, la mente de 4º rayo otorga una gran capacidad para polarizar, para pensar a través de los opuestos. En ese sentido, cabe observar que la presencia de dualidades es frecuente en la historia de ese país: unitarios y federales, Buenos Aires y el interior, europeísmo y latinoamericanismo, peronistas y radicales, modelos agrario e industrial, etc.

Como aspecto positivo de esta configuración, se halla la capacidad creativa y la soltura de una mente de 4º rayo, que suele ser colorida y con un alto sentido de la armonía. No puede sino hacerse mención de la alta creatividad argentina y su grácil despliegue artístico.

Por otra parte, la combinación 1º/6º para alma y personalidad, una vez equilibrada, ofrece una enorme capacidad de ir a fondo con las metas percibidas, ya que es la combinación de la aspiración con la voluntad, prácticamente las fuerzas volitivas más poderosas que pueden manifestarse hoy día.

La personalidad de 6º rayo del país siempre se ha evidenciado en cierto dejo idealista en su política exterior, en defensa de valores universales como la igualdad, la no violencia y el respeto a los derechos humanos, todos temas también del Ascendente Libra.

El signo de Cáncer es también prominente, y en ese caso es importante observar el rol de Argentina como proveedora de alimentos a nivel global, estando la alimentación ligada a dicho signo.

En lo atinente al alma, se aprecian ciertas líneas que podrían abonar la tesis de que el país sea un alma de 1º rayo. En primer lugar, si bien se trató de algo grupal, fue de Argentina de donde partió la independencia de Chile y Perú, además de la propia; el 1º rayo es el que inicia y rompe las cadenas que coartan la libertad. Ello sucedió tras abolir la esclavitud en el plano interno.

Existe por otro lado una nunca negada voluntad de ser una nación poderosa e influir en los asuntos globales, así como una histórica rivalidad con Estados Unidos, país con alma de 2º rayo de Amor-Sabiduría y personalidad de 6º rayo. Puede que la diferencia en el rayo del alma, combinada con el mismo rayo de personalidad, sea lo que genere esa aparente incompatibilidad entre ambas naciones.

Podría pensarse también que la voluntad de escapar de la bipolaridad en tiempos del comunismo sea también expresión del 1º rayo, forjando un camino propio junto al resto de los países integrantes del Movimiento de los No Alineados. Y en la misma línea, las más recientes oposiciones al ALCA y los organismos de crédito internacionales.

Desde un un ángulo constructivo, la energía de 1º rayo puede haberse expresado por la capacidad de sintetizar dentro de sus fronteras a inmigrantes de las más diversas procedencias. Otros aspectos serían el énfasis en el correcto uso de la fuerza y el decidido impulso a estructuras de poder alternativas para América Latina, como el caso de Unasur.

En resumen, de ser correcto este conjunto de rayos, sumado a lo astrológico, nos dejaría un país con tendencia a la polarización y la imposición de voluntades. A la vez, existiría mucho potencial en cuando a lo que puede realizar, una vez que las metas estén suficientemente esclarecidas y el campo mental esté más despejado. El tiempo dirá si, haciendo honor a su Ascendente Libra, Argentina se pierde entre los opuestos o por el contrario elige profundizar su tránsito por el camino que va entre las dos líneas de fuerza.